Mañana será un domingo de super acción: se definen la Eurocopa primero y la Copa América después. Sin sorpresas, con cuatro candidatos. Más allá de los vaivenes y desarrollos de los partidos, no es extraño que España, Inglaterra, Argentina y Colombia sean los protagonistas de una jornada histórica que seguramente marcará tendencia de cara a la Copa del Mundo de 2026 en Estados Unidos, Canadá y México.
Los ganadores de ambas finales disputarán la Finalissima a mediados del año próximo, probablemente en el Viejo Continente
España y Colombia son los que más argumentos futbolísticos mostraron para llegar a ese lugar de privilegio; Argentina e Inglaterra aportaron la chapa del campeón del mundo y de una selección siempre competitiva que tiene la mejor liga del mundo, pero que extrañamente nunca ganó la Eurocopa.
Inglaterra deberá ingeniárselas para equiparar futbolísticamente a un equipo superior, pero aquí lo que más interesa es cómo hará Argentina para someter a una Colombia que si no está en el tope de su rendimiento posible, está muy cerca.
Se notó mucho el miércoles, entre el equipo de Néstor Lorenzo y la selección uruguaya de Bielsa, que ese partido fue el mejor de la Copa América, el de mayor nivel y que tranquilamente pudo ser la final de la competencia.
La Copa América tuvo un sorteo desproporcionado, un pésimo sistema de cruces y muchas desigualdades en los rivales que enfrentaron los candidatos.
Mientras Argentina tuvo como rival más duro a Ecuador; Colombia, Uruguay y Brasil, los otros tres candidatos, debieron eliminarse entre ellos.
El miércoles, a Colombia la victoria le dejó secuelas: perdió por expulsión a Daniel Muñoz y probablemente a Richard Ríos por lesión para la final. Y tuvo un desgaste físico que puede pagar mañana aunque el tiempo de recuperación de allá a acá parece suficiente.
Colombia ratificó su condición de mejor equipo de la Copa América en la semifinal y ahora deberá rubricarlo frente al campeón del mundo.
Y ahí parece estar el quid de la cuestión. Más allá de los momentos y rendimientos puntuales, no es lo mismo tener del otro lado de la cancha a Argentina que a otro rival. Potencialmente, las jerarquías individuales del equipo de Scaloni amenazan cualquier estrategia.
Tan es así que Argentina es el candidato para ganar el torneo aunque Colombia jugó mucho mejor hasta aquí. Eso es cierto, pero enfrente tendrá a una selección que no pierde casi nunca y hasta gana cuando juega mal.
No puede soslayarse que hasta aquí enfrentó a equipos muy accesibles salvo Ecuador, que estuvo a punto de sacarla del torneo.
Tampoco debe despreciarse el análisis que pueda hacerse del recorrido de la selección desde el primer partido con Canadá hasta acá: Argentina debe mejorar para justificar su favoritismo en el resultado, pero tiene todos los elementos disponibles para levantar la Copa América por segunda vez consecutiva.
Nunca una selección de este lado del mundo ganó la Copa América, la Copa del Mundo y otra vez la Copa América.
¿Será esta vez?