Central tuvo una noche para el olvido y perdió 1-0 ante Platense en Vicente López por la fecha 15 de la Liga Profesional de fútbol. El Canalla llegaba con intenciones de recuperar los puntos perdidos en Arroyito pero se topó contra un Calamar que dominó el juego y le ganó con justicia.
El único grito del partido fue obra de Guido Mainero. El equipo de Matías Lequi no pudo sobreponerse a ese golpe tempranero, no encontró nunca los caminos y dio grandes ventajas defensivas. Hasta desperdició un penal en la última bola del encuentro: Maxi Lovera lo estrelló contra el palo. Ganó un solo partido de los últimos siete y la clasificación a las copas internacionales le queda cada vez más lejos.
Platense golpeó de entrada y rompió el cero a los 8 minutos del primer tiempo. Guido Mainero recibió la pelota en tres cuartos, abrió para la subida de Bautista Barros Schelotto por la derecha y fue a buscar la descarga al área, donde le ganó la espalda a Miguel Barbieri y definió para el 1-0.
El Canalla de Matías Lequi tuvo serias dificultades para defender en la etapa inicial. Dio ventajas en la zona media porque Franco Ibarra y Mauricio Martínez jugaron desordenados. Y el Calamar encontró huecos para atacar por el costado derecho porque Jaminton Campaz no retrocedía y Agustín Sández quedaba mano a mano con Mainero.
Con mucho espacio entre los volantes y la línea defensiva, los zagueros auriazules –especialmente Miguel Barbieri, de muy flojo partido– se vieron obligados a salir muy lejos y no la pasaron nada bien. El local llegó un par de veces más pero Mateo Pellegrino no estuvo fino para el último toque y dejó con vida a los rosarinos.
Central intentó reaccionar pero quedó lejos. Ignacio Malcorra fue el encargado de manejar los ataques y por momentos pudo asociarse bien con Campaz, aunque a los dos les costó profundizar y por eso el equipo contó con pocas chances peligrosas cerca del arco de Juan Pablo Cozzani.
Además de un remate de media distancia de Mauricio Martínez que descansó en las manos del arquero calamar, la más clara para el conjunto de Lequi fue en una pelota parada: Barbieri saltó junto a Cozzani en el área, ganó de cabeza y convirtió el empate, pero el árbitro Andrés Merlos consideró que hubo una carga ilícita sobre el futbolista de Platense y lo anuló.
El flojo primer tiempo de Central evidenció que el equipo necesitaba algún retoque para intentar cambiar el rumbo, y la primera decisión del DT fue romper el doble cinco, sacar a Martínez y darle pista a Lautaro Giaccone. Con ese cambio salió a jugar el complemento.
El conjunto auriazul empezó a tener más la pelota y pudo adelantarse en la cancha porque Platense lo dejó venir, pero los problemas para construir en ataque se repitieron. Tampoco cambió demasiado con el ingreso de Maximiliano Lovera, ya promediando la segunda parte.
El trámite le quedó servido al Calamar para liquidarlo de contragolpe. Fabricó unas cuantas chances para estirar la diferencia pero falló en el último pase o en la definición, ante una defensa canalla que sufrió toda la noche y no dio seguridad. Lo único positivo para Central era que seguía estando a solo un gol del empate.
Esa corta distancia en el resultado le dio la chance de salvar la derrota en una de las últimas bolas del encuentro, ya en tiempo agregado, por una mano de Gómez en el área que Merlos, a instancias del VAR, sancionó como penal.
Pero Lovera, héroe del título en la Copa de la Liga justamente ante Platense, esta vez fue villano: quiso ajustar el balón contra el palo derecho, dio en el caño, recorrió toda la línea y salió. A Central no le salió ni el tiro del final y desperdició una chance inmejorable para al menos irse con un punto. No quedó claro por qué no lo pateó Malcorra, el designado por el DT.
El rendimiento del equipo, muy por debajo de lo esperado, fue un retroceso que enciende algunas luces de alarma en Arroyito y se refleja en los números: después de quedarse con el clásico, los auriazules solo ganaron un partido de siete.
La próxima prueba será de máxima exigencia para Central, ya que recibirá en el Gigante al líder Vélez, el martes 1 de octubre a las 20.30.