Fue un jueves distinto en Buenos Aires. Hubo reunión de directivos del fútbol argentino en la Superliga (estuvieron la mayoría de las instituciones, a excepción de River e Independiente). Y entre varios temas, se puso en consideración -una vez mas- la quita de los promedios para la próxima temporada.
Pero esta vez la iniciativa tomó más fuerza que en las veces anteriores, a tal punto que por los pasillos de la AFA ya se hablaba al final del día de que la destitución del coeficiente para definir descensos se implementaría luego de la finalización de la Copa América.
Lo cierto es que aún falta un paso: la Asamblea, en la que los clubes deberán refrendarla por mayoría simple, pero ya muchos dan por descontado que se realizará. Y de ser así, en Rosario habrá festejos de ambos bandos: leprosos y canallas.
Los directivos de Rosario Central y Newell's Old Boys que concurrieron fueron el presidente centralista Rodolfo Di Pollina –también participó Ricardo Carloni- y el secretario ñubelista Juan José Concina.
"Desde un principio estuvimos de acuerdo con la quita del promedio, porque un plantel, director técnico y directivos no pueden pagar por malas campañas que no fueron responsables", fue el argumento de Di Pollina para defender la postura.
Por su parte, Concina admitó: "Nos permitiría armar un proyecto serio para que el club y los directivos no tengan que someterse a la presión del descenso por problemas que fueron de gestiones anteriores".
El tema de los promedios, si son justos o no, se viene analizando desde hace muchos años, desde el mismo momento que se implementó en el Metropolitano de 1983.
En 1982 descendió San Lorenzo y en ese momento la AFA –bajo la hegemonía de Julio Grondona- se planteó instaurar los promedios porque estaban en una situación complicada nada más y nada menos que River y Boca. Desde la mesa chica, con muy pocos dirigentes, se decidió implementar los promedios para ayudar a los equipos grandes. Y dos años mas tarde se aplicó.
Ahora parece que llegarán a su fin y en una ciudad como Rosario, en la que sus dos equipos están comprometidos, ésto se toma como un gran alivio.
Los periodistas
Consultados al respecto, la mayoría de los periodistas de la ciudad celebró la decisión. Para David Luis (Radio 2), "si se confirma, Newell's y Central tienen que organizar una peregrinación a Luján para agradecer”.
Para Alejandro Cachari (Radio 2), "siempre fueron justos los promedios porque tenés responsabilidad en tres temporadas si hiciste las cosas mal. Pero si en ningún lado del mundo se utilizan, eso es evidente que está mal. Igual es una locura sacarlos de repente: hay que programarlos, no sacarlos en una temporada”.
Jesús Emiliano (relator de Radio 2) subrayó: "Tigre nos metió en un gran lío. Acá no hay convicción, idea concreta, proyecto. Si esto se da así empezarían todos iguales, no habría ventaja desde ese lugar. Pero es siempre a partir de un papelón"
Por su parte, el otro relator de esa emisora Alejandro Mangiaterra opinó: “Los promedios fueron generados para castigar a aquellos equipos que hicieran las cosas mal durante tres temporadas. Lo cual trajo consigo la casi nula posibilidad de que un equipo grande sostuviera tan bajos rendimientos durante tanto tiempo. En consecuencia, lo que parecía una medida justa, esto es, castigar a quienes son los peores durante largo rato, no me parecía ilógico”.
Pablo Montenegro, conductor de El Tres, piensa distinto: "Me parece justo que se vayan al descenso los últimos de la tabla. Porque el promedio o acaba protegiendo a equipos que hacen malas campañas o hay otros casos como el de este Tigre de Gorosito que paga con el descenso la flojedad anterior".
Enrique Genovar, del diario El ciudadano, coincide con Montenegro: “Me parece bien. Es un triunfo de los clubes con menos poder. Los promedios se habían creado para favorecer a los equipos grandes. Pero así y todo también hubo descensos de algunos de esos clubes. Ahora va a ser más justo”.
En tanto, Mariano Berenizky (diario La Capital) no coincide con las formas: “Creo que el promedio debe eliminarse, pero no así como pretenden los clubes que están comprometidos. Los puntos se deben ganar dentro de una cancha”.
El relator de TyC Sports, Julián Bricco, está de acuerdo: "Era injusto para aquellos que ascendían porque no podían estabilizarse. Creo que esto equipará las cosas con los equipos grandes, que después de una buena campaña iban a los torneos internacionales relegando el campeonato local. Y regresaban al otro año para seguir sumando”.
Luis Castro, del diario La Capital, señaló: “Me parece algo bueno y que hace rato se estaba esperando. El que hace un mal torneo que descienda y listo. Y basta de sumar puntos y dividir, porque es todo engorroso. Además muy injusto para los que recién ascienden”.