El Ministerio de Seguridad de Santa Fe realizó este martes inspecciones en los estadios de Rosario Central y Newell’s de cara al regreso del público local a los partidos de la primera división. Durante el operativo en el Gigante de Arroyito, las autoridades provinciales ordenaron remover pintadas y la estructura de caños de la popular.
De acuerdo al comunicado de la cartera que comanda Jorge Lagna, la instrucción que se le dio al club de Arroyito es la de “remover antes del 1° de octubre la pintada ubicada detrás de uno de los arcos con la consigna «los Guerreros», que hace referencia a la barra de Rosario Central; y la estructura de caños que ocupa la parte superior de la popular”.
Con respecto a esta estructura, los funcionarios de seguridad destacaron que se trata de restos de lo que fueron las cabinas de transmisión durante el Campeonato Mundial de 1978. “Hoy supone un riesgo a la seguridad y salud de las personas que de manera sistemática se trepan a la misma”, remarcaron en el escrito.
Además, remarcaron que ese espacio en cuestión es “la base de una liturgia de validación social inadmisible de la barrabrava”.
Por último, la inspección de seguridad preventiva ordenó al club remover de inmediato “toda pertenencia que pudiera haber de la barrabrava y pudiera estar acopiada dentro del club”.