La Conmebol anunció este martes, a través de un comunicado, que Lima es la nueva sede para la final de la Copa Libertadores entre River Plate -defensor del título- y Flamengo de Brasil.
La definición se jugará a partido único en el estadio de Monumental del club Universitario de la capital peruana y se mantiene el día original: el sábado 23 de noviembre, a las 17.30.
La Conmebol, en una reunión con dirigentes de las federaciones argentina y brasileña además de representantes de los clubes finalistas, optó finalmente por descartar Santiago de Chile –a pesar que el gobierno de Sebastián Piñera pretendía organizarlo– por los conflictos sociales que azotan el país trasandino desde hace algunas semanas.
"Nuevas circunstancias de fuerza mayor y orden público, analizadas y evaluadas con prudencia, considerando la seguridad de los jugadores, del público y de las delegaciones, motivaron la decisión de llevar la final de la Copa Libertadores 2019 a Lima, Perú, y mantener la fecha del 23 de noviembre", argumentó la Conmebol.