A Paolo Montero se lo vio aliviado luego de la victoria de su equipo sobre Cañuelas, pero de ninguna manera eufórico. Valoró el pase a la siguiente fase y el trabajo de los juveniles que fueron de la partida este martes en Santa Fe, pero a la vez reconoció las dificultades que tuvo su equipo para sacarse de encima a un rival tres categorías inferior.
“Nos vamos contentos por la clasificación y por los jóvenes, ellos se tienen que dar cuenta de que tienen que trabajar al máximo porque los vamos a necesitar”, aseguró Montero en el vestuario ganador del estadio 15 de abril.
A la hora de destacar el trabajo de los chicos del club que jugaron este partido, resaltó lo hecho por Renzo Alfani (el DT sorprendió al darle la cinta de capitán) y Maximiliano Lovera. “Son jugadores que sienten mucho esta camiseta y que a cada paso nos demuestran que tienen hambre de primera división”, apuntó.
Acerca de la dificultad que ofreció el compromiso de 32avos de final de esta Copa Argentina, indicó: “Sabíamos que iba a ser difícil por le ímpetu y las ganas del rival”.
“En el segundo tiempo encontramos algunas chances con las que podríamos haber logrado una ventaja mayor”, analizó el uruguayo.
Y consideró que “partidos como estos los tenés que liquidar porque ante cualquier distracción te marcan y se te puede complicar la clasificación”.
“En el manejo del partido no me voy conforme, pero vinimos a buscar la clasificación y nos vamos con el objetivo logrado”, insistió Montero.
Y remató: “Vos mirás la previa del partido y decís lo tenemos que ganar 4 a 0, pero eso es una mentira porque hoy el fútbol argentino es muy parejo. Tácticamente todos los jugadores están preparados y Cañuelas manejó muy bien la pelota”.