Tras consagrarse campeón del US Open, el Grand Slam número 24 del tenista serbio Novak Djokovic, se viralizaron imágenes suyas de la infancia en la que soñaba su realidad de hoy: ser el número 1. 

En uno de los videos, se ve al pequeño Djokovic dar sus primeros golpes, motivado por su entrenador. En otro, con algunos años más, contó sus objetivos: ser el número 1 del tenis mundial.

“Para mí el tenis es una obligación. Mi meta es ser el número 1 del mundo”, remarcó después de explicar cómo eran sus días durante su etapa escolar. Sin dudas, su sacrificio basado en los entrenamientos nocturnos para cumplir con las obligaciones del colegio marcaron a fuego a uno de los mejores deportistas de la historia. Su consagración en el Abierto de Estados Unidos, tras imponerse con autoridad en sets corridos por 6-3, 7-6 (5), 6-3 ante el ruso Daniil Medvedev le dejó con una cosecha de tres trofeos esta temporada.

“Probablemente, suene engreído o arrogante, pero en realidad no me sorprende. Sé cuánto trabajo y dedicación he dedicado para poder estar en esta posición. Sé que me lo merezco”, dijo Djokovic en el último contacto con la prensa antes de vencer a Medvedev en Nueva York. “Siempre creo en mí mismo, en mis propias capacidades, en mi talento como tenista, para poder cumplir en los momentos que importan. Para ser honesto, no me sorprende mucho”, argumentó. Y completó: “Me siento fuerte. Estoy en plenas condiciones físicas, no quiero decir mejor que nunca, pero al mismo nivel de todos estos años”.

Djokovic cumplió el sueño de ser número 1 por primera vez el 4 de julio de 2011 con 24 años. Desde entonces, han sido 7 las temporadas que terminó en la cima del ranking ATP, lo que lo convierte en el líder en cuanto a esta estadística. Con 389, también tiene el récord de mayor cantidad de semanas como número 1, una cifra considerablemente mayor a las 310 que tiene Roger Federer, el segundo en este dato.

En el Abierto de Australia, Nole superó a Stefanos Tsitsipas, y en Roland Garros le ganó a Casper Ruud. Ambos tenían 24 años. Es decir, que había más de una década de diferencia con sus oponentes. “La edad es solo un número, esa frase resuena en este momento conmigo”, dijo el serbio en conferencia. Y detalló: “Ni siquiera estoy contemplando el retiro del tenis o pensar en un final cuando estoy en mi apogeo”.