Lionel Messi se quejó del arbitraje durante el partido en el que la selección nacional cayó ante Brasil. Tras la derrota en las semifinales de la Copa América, consideró que el árbitro Octavio Zambrano le faltó el respeto por su actuación. También defendió a los jugadores. "Hay una camada buena que demostró que ama a la Selección con una base muy importante. Ojalá se los respete”, sostuvo.
"Hay bronca porque hicimos un gran partido. Fue un esfuerzo muy grande que no mereció terminar de esta manera. Ellos se encontraron con el primer gol cuando no lo merecían", comenzó en su análisis el delantero del Barcelona. "Se cansaron de cobrar boludeces durante toda la Copa América y hoy no le cobraron un penal a Otamendi. Es para analizarlo. Ojalá que la Conmebol haga algo, porque nosotros hicimos un sacrificio enorme. Igualmente, no creo que ha nada porque maneja todo Brasil", agregó.
"Todas las boludeces se cobraron a favor para ellos. Hubo penales pelotudos durante toda la Copa y hoy ni siquiera consultaron el VAR", insistió en una rueda de prensa y advirtió: "Ojalá que respeten a estos chicos, porque demostraron que aman a la Argentina de verdad. Acá, hay futuro".
Con relación a lo sucedido en el Mineirao, el ídolo del Blaugrana reconoció que hubo "dos tiros en los palos y el penal que no nos cobraron". "Da bronca, porque son jugadas que te van sacando del partido. El árbitro no fue justo. Nos faltó el respeto con el arbitraje que hizo, aunque no es excusa", remarcó.
Messi aclaró que después de la participación en Brasil, "empezó algo nuevo". "Hay una camada buena que demostró que ama a la Selección con una base muy importante. Ojalá se los respete y que no le empiecen a dar con todo. Creo que hay futuro", subrayó y añadió: "Me encontré muy bien con este grupo. Si tengo que ayudar de algún lado, lo voy a hacer. Siempre los voy a acompañar", concluyó.