Newell’s vive un jueves muy especial, como todos los jueves previos al clásico desde hace más de 20 años. Los hinchas vuelven al Coloso como en misa y llevarán a cabo el tradicional Banderazo para apoyar al plantel en vísperas del partido ante Rosario Central en el Parque.

Se trata de la primera experiencia de Gabriel Heinze como conductor de equipo, antes había participado como futbolista. Para esta edición, se decidió que los jugadores ingresen al campo de juego acompañado de sus familiares para poder compartir la fiesta. Previo a esto, solo los jugadores participaban desde el césped. También participó el plantel de Reserva.

"La gente no deja de erizarte la piel por el apoyo. Es increíble, nos han hecho sentir eso nuevamente y estamos con ganas de salir a jugarlo", dijo Willer Ditta tras la ceremonia. 

Y agregó sobre la posibilidad de vivir esta experiencia en familia: "Es muy importante que nuestras familias vivan esta experiencia. Ojalá le podamos retribuir este cariño a la gente el domingo".

Por su parte, fue la primera experiencia de Jherson Mosquera: "Fue algo muy especial y muy lindo. Fue un plus que nos ayuda a concentrarnos en lo que viene. Feliz de ver a toda la gente unida y esperemos poder festejar el domingo".

Este jueves 6 de abril se abrieron las puertas del estadio pasadas las 18 para los miles de hinchas que se hicieron presentes para alentar al equipo y disfrutar del rojo y negro en las tribunas, a pesar de que no se desarrolle siquiera un entrenamiento. 

Sharon Romero, secretaria de Newell's habló con el móvil de De 12 a 14 (El Tres) de cara al banderazo y expresó que estaban habilitadas solo la tribuna Este y las dos populares".

Además, comentó: "Para este jueves, hay 340 efectivos policiales y el evento durará 45 minutos o una hora".

Para el domingo, habrá un operativo especial, donde los hinchas deberán presentar su DNI para el ingreso al estadio. Habrá más de 560 efectivos policiales y las puertas se abrirán a las 13.30.

Tal acontecimiento, que es seguido y destacado desde diferentes países, es ya una tradición para los leprosos y un momento único, según palabras de los protagonistas: futbolistas e integrantes de los diferentes cuerpos técnicos que pasaron por la institución.