El duelo entre Central y Sarmiento en el Gigante de Arroyito dejó algunas jugadas para el análisis del VAR. En un lapso de sólo cinco minutos, en la primera etapa, el árbitro Fernando Echenique tuvo que agudizar el ojo para tomar decisiones importantes, al igual que los jueces responsables de la asistencia con tecnología.
La primera acción se dio a los 25 minutos. El equipo de Junín metió la pelota en el área, Lisandro López no pudo controlar y el balón dio en el brazo de Ignacio Malcorra, que iba a la marca del nueve. Toda la visita pidió penal.
El árbitro, enseguida, indicó con sus señas que había sido casual, pero desde el VAR también la revisaron. No obstante, ni siquiera tuvo que ir a observar la pantalla y se mantuvo la correcta decisión que había tomado. No pasó nada.
Unos minutos después, se produjo una de las acciones que cambió el partido. Frías y Quintero fueron a disputar la pelota y el futbolista de Sarmiento extendió el brazo e impactó levemente en la cara del Chipi, que cayó al suelo.
Echenique actuó rápidamente y sacó la roja del bolsillo para expulsarlo. Desde el VAR no hicieron ninguna observación y Central se quedó con un hombre más a los 30 de esa primera parte.
Esta vez, tanto el juez como la asistencia del VAR, con decisiones acertadas, jugaron en beneficio del equipo de Carlos Tevez.