A medida que pasa el tiempo, y así será de aquí a la eternidad, van surgiendo nuevas historias del histórico domingo 18 de diciembre de 2022, cuando Argentina consiguió su tercer campeonato del mundo en Qatar. La que se conoció en las últimas horas es, sencillamente, increíble. Parece que en el momento de los descontrolados festejos en el campo de juego del estadio Lusail, ingresó una copa del mundo trucha, que comenzó a circular entre los jugadores y sus familiares. Hasta que llegó a manos del mismísimo Lionel Messi, que posó con el trofeo apócrifo en una foto icónica: la que obtuvo más “me gusta” en toda la historia de la red social Instagram. ¿Qué pasó?
La anécdota fue contada por Paula y Manuel, una pareja que viajó desde La Plata hasta Qatar para presenciar el Mundial. El día de la final ante Francia, decidieron llevar a la cancha una copa que es casi idéntica a la original de la FIFA. “Tiene el peso de la original, por eso no fue fácil ingresarla al estadio”, contaron.
Cuando la selección dirigida por Lionel Scaloni se coronó campeona del mundo y luego de que Lionel Messi levantara el trofeo que le acercó Infantino, el presidente de la FIFA, comenzó lo más jugoso de esta historia.
“La copa ingresó tres veces al campo de juego”, describió Manuel. “La primera vez la entraron familiares de Leandro Paredes, que nos la pidieron para sacarse fotos”, agregó. “Me acuerdo que pasaban los jugadores y les decíamos «por favor si ven una copa que no es la origianl traiganla para acá porque es nuestra»”, confió.
La copa trucha volvió a las manos de sus dueños, pero en el terreno de juego seguía la locura y el festejo desenfrenado y desde adentro volvieron a pedirla para más fotos y recuerdos. “Cuando todo se tranquilizó un poco empezamos a ver fotos del recorrido que había tenido la copa en el campo de juego. Hasta que comprobamos que había llegado a las manos de Lionel Messi y es la copa que Leo levanta en la foto que se convirtió en la más laikeada del mundo”, detalló Manuel.
Todo este relato, que parece de fábula, fue ratificado por la familia de Di María, que se sacó fotos con la copa verdadera mientras el capitán se paseaba en andas del Kun Agüero con la falsa. Y por el propio Angelito, que dio detalles de la charla que tuvo con Messi y que todo el mundo vio a través de la televisación oficial: Di María relató: “Él (Messi) estaba en andas con la copa y a la vez yo tenía la copa en la mano, no entendía nada. Pero la seguridad de la FIFA estaba al ladó mío, no se me despegaban. Y me dicen «aquella copa es falsa, por eso estamos al lado tuyo», me decían”.
La pareja describió la copa falsa tiene detalles en la base diferentes a la original. Por eso pudieron comprobar que Antonela Roccuzzo y los hijos de Messi también se sacaron fotos con el trofeo trucho. “Por eso la FIFA no la puede sancionar”, bromearon.
En definitiva, cuando dentro de muchos años se repasen las imágenes del Mundial que ganó Messi, se lo verá al capitán dando la vuelta con una copa del mundo que no es la original. Pero será solo una anécdota en medio de una alegría colectiva nunca vista en la Argentina.