El primer partido del Grupo B del Mundial de Qatar 2022 entre Inglaterra e Irán tuvo dos episodios que resaltaron por encima de lo estricatamente deportivo antes de que empiece a correr la pelota. Es que ambos seleccionados se expresaron en señal de apoyo por diferentes causas: los iraníes en respaldo a las históricas protestas de mujeres en su país tras la muerte de Mahsa Amini y los ingleses a favor del “Black Lives Matter”.
Los once jugadores titulares de la selección de fútbol iraní se abstuvieron este lunes de cantar el himno nacional antes del inicio del partido contra Inglaterra en el Mundial de Qatar, en respaldo a la ola de protestas desatadas en septiembre pasado en Irán por la muerte de Mahsa Amini tras su detención por no llevar bien puesto el velo islámico.
Durante la semana, el capitán del equipo, Alireza Jahanbakhsh, declaró que el vestuario decidiría "colectivamente" si cantar o no el himno como señal de apoyo a las manifestaciones que sacuden Irán desde hace dos meses.
Jahanbakhsh, jugador del Feyenoord Rotterdam, también sostuvo que celebrar o no gol durante el Mundial sería una elección "personal".
Finalmente, los once jugadores se mantuvieron rectos, impasibles y con rostro neutro mientras su himno resonaba en el Estadio Internacional Khalifa, informó la agencia de noticias AFP.
Irán está sumido en una ola de protestas desde la muerte el 16 de septiembre último de Mahsa Amini, una kurda iraní de 22 años detenida por violar el estricto código de vestimenta que obliga a las mujeres a llevar el velo en público.
La selección iraní ya había rechazado cantar el himno durante la previa de un amistoso de preparación en Austria contra Senegal (1-1) el pasado 27 de septiembre.
Ataviados entonces con una chaqueta negra que ocultaba el escudo nacional, los jugadores se mantuvieron en silencio, la mayoría de ellos con la cabeza agachada.
Varios deportistas de otras disciplinas eligieron también no cantar el himno, no celebrar las victorias o portar un brazalete negro durante eventos deportivos.
Por otro lado, los jugadores de Inglaterra también comenzaron su Mundial con un gesto de protesta, en su caso en apoyo al movimiento “Black Lives Matter”, luego de que en las horas previas al juego se especulara, además, con la posibilidad de que el capitán Harry Kane saliera al campo con un brazalete en respaldo a la comunidad LGBT+, algo que finalmente no sucedió ante posibles sanciones de la FIFA.
Sin embargo, el delantero del Tottenham de la Premier League sí lució una cinta negra con la inscripción “No discrimination” que se visualizó ni bien se quitó la campera que usaron los titulares en la entonación de los himnos.
Además, los once futbolistas en el campo se arrodillaron en apoyo al movimiento "Black Lives Matter", que lucha contra el racismo y es un protocolo común en la previa de cada duelo de la Premier League.
De acuerdo a los reglamentos de las Copas del Mundo, si un combinado nacional utiliza un brazalete a modo de manifestación política se expone a sanciones por parte de la FIFA.