La FIFA publicó este lunes su decisión final sobre la denuncia por posible acoso sexual y maltrato contra Diego Guacci, ex entrenador de River, UAI Urquiza y las Selecciones Sub 15 y Sub 17, que comenzó el 28 de enero de 2020.
Tras dos años de espera e investigación, la Comisión de Etica del máximo ente del fútbol internacional decidió cerrar el caso sin sancionar al DT por "no contar pruebas suficientes" para acreditar los hechos por los que fue acusado. Las declaraciones de las jugadoras no alcanzaron para determinar su culpabilidad, según explica el fallo.
En el documento, que consta de 40 páginas en las que se encuentran las denuncias de cinco jugadoras cuyos nombres se mantienen en reserva, así como las declaraciones de los testigos que fueron presentados por el técnico en su defensa, la Comisión deja constancia de que no establece que los hechos denunciados no ocurrieron, pero sí que sobre las bases de las pruebas presentadas no se mostraron satisfechos para llegar a otra decisión que no sea la de absolver al acusado.
La denuncia tomó estado público cuando la FIFPro -organismo que nuclea a jugadores de todo el mundo y que busca proteger sus derechos- publicó en mayo del 2021 que bajo su patrocinio legal un grupo de jugadoras argentinas habían presentado esta denuncia en la Comisión de Etica de la FIFA contra un DT por maltrato a menores e inconducta sexual en el período 2012-2015.
Las jugadoras, de quienes se decidió resguardar sus nombres, se presentaron a declarar según fueron citadas ante la Comisión, explicando cada una de las situaciones que vivieron, varias de ellas siendo menores de edad.
Sin embargo, para la FIFA, no hubo pruebas suficientes para corroborar los hechos, teniendo en cuenta además que Guacci presentó una larga cantidad de testigos que desestimaron los hechos.
Pese a la decisión de la FIFA y a que la única persona que puede apelar esta decisión es el jefe que encabezó la investigación (por las normas y jurisprudencias de FIFA ni las jugadoras ni FIFPro pueden hacerlo), la agrupación sindical criticó duramente a la FIFA no solo por la decisión de no sancionar al acusado sino también por las formas en las que fue comunicada esta noticia, sin proteger a las denunciantes del impacto que podría tener esta determinación.
"Las futbolistas fueron extremadamente valientes para desafiar la conducta del entrenador y contribuir a hacer del fútbol un entorno más seguro e inclusivo para sus compañeras. La decisión de la Comisión de Ética de la FIFA plantea dudas sobre cuánta evidencia se necesita para la acción disciplinaria y podría evitar que otras jugadoras se enfrenten a los perpetradores de acoso y abuso en el futuro", dice la FIFPro en su comunicado publicado en redes sociales.