El fútbol español quedó envuelto en un verdadero escándalo este martes, cuando la Policía Nacional detuvo a varios jugadores y ex futbolistas de primera y segunda división por arreglar partidos y favorecer a las casas de apuestas.

Entre la lista de jugadores arrestados figura Raúl Bravo, quien jugó en el Real Madrid de los Galácticos e integró la selección española en la Eurocopa 2004, Borja Fernández, recién retirado tras jugar las dos últimas temporada en el Real Valladolid; Carlos Aranda, ex jugador de varios equipos de Primera División (Numancia, Villarreal y Sevilla, entre otros); e Íñigo López, actualmente en el Deportivo de La Coruña.

El español Samu Saiz, actual jugador del Getafe, es otro de los investigados, pero no fue detenido.

También fue apresado Agustín Lasaosa, presidente de la Sociedad Deportiva Huesca, y Juan Carlos Galindo Lanuza, jefe de los servicios médicos de dicho club, que es uno de lo que desató la trama.

A todos los detenidos se les imputa por pertenencia a organización criminal, corrupción entre particulares y blanqueo de capitales.

Raúl Bravo, ex jugador del Real Madrid.

Pedro Camarero, abogado del Huesca, dio explicaciones en la sede del club: "Hay secreto de sumario. La decisión de las detenciones las ha tomado el Juzgado Número 5 de Huesca y nos tenemos que someter a las directrices del juzgado. Posteriormente vendrá la comisión judicial a hacer un registro. Desde el club no hay ninguna preocupación y estamos a disposición de los que nos pidan desde el juzgado”.

Un partido entre el Valladolid y el Valencia figura entre los sospechosos de haber sido amañados.

Según indicaron a la agencia EFE fuentes próximas a la investigación, este encuentro fue uno de los amañados, además de otro partido entre el Huesca y el Nástic de Tarragona y al menos otro más entre equipos que las fuentes no revelaron.

En ese partido de Liga, disputado el pasado 18 de mayo en el estadio vallisoletano José Zorrilla, el equipo local perdió 0-2 y el Valencia obtuvo, con su victoria, plaza para la Liga de Campeones como cuarto clasificado, en detrimento del Getafe.

Tal y como se desprende de las pesquisas, la trama seleccionaba los encuentros, captaba a futbolistas y les pagaba en efectivo por adelantado para que se dejaran ganar.

De este modo, podían hacer apuestas combinadas –resultado final y resultado de la primera parte; resultado final y número de córners, por ejemplo– y se aseguraban las ganancias en las apuestas deportivas.