En un partido parejo y de pocas luces, la acción que abrió el marcador y le dio la victoria a Sarmiento sobre Newell’s generó bronca e impotencia en la Lepra porque se trató de una falta mal sancionada por el juez Pablo Dóvalo.
El encuentro se acercaba al primer cuarto de hora del segundo tiempo, cuando Lisandro López, rodeado por Juan Garro y Marcelo Esponda, quiso rematar de zurda, le erró al balón y por la continuidad del movimiento, pero también por querer fabricar la falta, cayó al piso.
El árbitro estaba a un metro y medio de la jugada y le dio un tiro libre muy peligroso al Verde, que Yair Arismendi se encargó de ejecutar con mucha clase para darle la victoria a su equipo.
Todos los futbolistas rojinegros protestaron el fallo, al igual que el técnico Adrián Coria y todos sus colaboradores desde el banco, pero la decisión no se modificó y en el Parque todos se fueron muy calientes con Dóvalo.
Otro de los aspectos que generó interrogantes, sobre todo entre los hinchas, fue la no intervención del VAR para corregir la sanción. Sucede que el reglamento establece que sólo puede utilizarse en jugadas dentro del área -de posible penal- o que impliquen determinaciones de expulsiones, entre otras situaciones.
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