El colombiano Yerry Mina tuvo una particular presentación en el Barcelona, cuando pisó descalzo el césped del estadio Camp Nou, en un ritual religioso.
El defensor Mina, que el Barca le compró al Palmeiras de Brasil por 11,8 millones de euros, cumplió con la costumbre que tuvo en todos sus clubes: salió por el túnel, saludó al público, posó para algunas fotos y cuando llegó a la línea de cal se detuvo, se sacó las medias y los botines e ingresó descalzo a la cancha, según informaron los portales de varios diarios españoles.
"Hay un versículo en
"Todo lugar que pisare la planta de vuestro pie será vuestro; desde el desierto hasta el Líbano, desde el río Eufrates hasta el mar occidental será vuestro territorio", reza el versículo al que se refirió el futbolista.
"¡Visca el Barça!", gritó Yerry Mina, emocionado, frente a los periodistas y unos 8.500 aficionados culés que asistieron a la presentación del nuevo compañero del rosarino Lionel Messi.
Después, con los botines puestos, el colombiano -famoso también por sus bailecitos- hizo unos toques con pelota junto a niños de las categorías inferiores del Barcelona y posó con el nuevo automóvil que regaló uno de los patrocinadores del equipo.