Luego de los incidentes entre agentes policiales e hinchas de Central registrados el martes a la tarde cuando el micro con el plantel auriazul llegaba al Gigante de Arroyito, antes del cruce ante Mineiro por la Copa Libertadores, desde el Ministerio de Seguridad de Santa Fe justificaron el accionar de la Policía. “Se vulneró el operativo y había que restablecer el orden”, afirmó el director provincial de Seguridad Deportiva, Fernando Peverengo.
Los disturbios ocurrieron alrededor de las 17 en inmediaciones del parque Alem, donde miles de simpatizantes auriazules se congregaron para recibir al colectivo que transportaba al equipo y al cuerpo técnico hacia el estadio para el partido contra el equipo brasileño, que se disputó a puertas cerradas por la sanción impuesta al club por la Conmebol.
Los hinchas denunciaron represión y extrema violencia de parte de los agentes policiales que custodiaban el traslado del micro y desalojaron la calle con balas de goma y gases lacrimógenos. En diálogo con El Tres, varias personas exhibieron las heridas provocadas en distintas partes del cuerpo y algunas escenas quedaron registradas a través de teléfonos celulares.
En tanto que desde las fuerzas de seguridad adujeron que debían “cumplir horarios” de llegada al Gigante, que la situación “se desbordó” porque “miles de personas pararon el colectivo” y corría riesgo “la integridad del personal policial” y de los “bienes del Estado”, en relación a un grupo de personas que se trepó a un patrullero.
“Miles de personas pararon el colectivo. Entendimos que era una situación extrema, tomamos la decisión de disuadir, el mensaje es claro, entendemos al hincha pero nunca la pasión va a estar sobre la razón”, expresó Peverengo en diálogo con el programa Radiópolis (Radio 2).
El funcionario manifestó que “a la Policía de Santa Fe hay que respetarla” y explicó que ante situaciones de este tipo “hay que tomar decisiones en el momento” para resguardar al hincha y a los agentes. "Cuando las situaciones se desbordan la policía tiene que actuar”, dijo.
Para el director provincial de Seguridad Deportiva, los agentes policiales disuadieron y no reprimieron a los simpatizantes de Central que fueron a recibir al plantel antes del encuentro que luego el Canalla perdió ante Mineiro: “Había más de mil personas y muchachos saltando arriba de un patrullero, están destruyendo un bien del Estado”.
“Para nosotros no es gracioso ni antojadizo pasar por situaciones como esta, pero cuando un operativo se vulnera el personal policial está para actuar”, apuntó y recordó los incidentes ocurridos antes y durante el partido del conjunto auriazul frente a Peñarol, el pasado 4 de abril, que desembocó en el castigo de Conmebol.
“Venimos de situaciones extremas en el partido anterior. Hablábamos del afuera y del adentro. Hubo incidentes en el partido por el accionar de la gente, no fue culpa de la Policía. Como responsables, analicemos todo lo que haya que ver, pero también evaluemos el comportamiento de las personas”, pidió Peverengo.