Marcelo Bielsa no fue a la ceremonia en la que la FIFA le entregó a él y a su equipo, el Leeds inglés, el premio The Best al fair play, por ordenar a sus jugadores que se dejaran hacer un gol Aston Villa, en la temporada pasada de la Football Championship, luego de que el Leeds convirtiera con un jugador rival lesionado y el resto pidiendo que detuvieran el juego para atenderlo.
El entrenador envió en su representación al preparador físico y a Liam Cooper, capitán del equipo. Este último leyó una carta de Bielsa sobre aquel hecho y rescató que fueron su madre y el club Newell's Old Boys los factores fundamentales de lo que hoy es su pensamiento sobre el fútbol.
A continuación, el mensaje completo
"Buenas noches. En el partido entre el Leeds y el Aston Villa de la temporada 2018/19 convertimos un gol cuando el oponente no estaba en condiciones de jugar el partido. Inmediatamente después, cuando el juego se reanudó, servimos la situación a nuestro rival de poder convertirnos un gol e igualar el partido. La FIFA decidió reconocer nuestro comportamiento. Naturalmente quiero agradecer, compartir y dedicar esta distinción a la FIFA, al Leeds United y a sus hinchas, que no cuestionaron mis acciones cuando podrían haber reclamado que se respetara la decisión oficial pero, en cambio, aceptaron mi particular interpretación de diferenciar algo que es legal de algo que es injusto. Mi ayudante y el capitán, Liam Cooper, se hicieron presentes en este evento. El primero influenció significativamente en mi decisión y el segundo representa al jugador que apoyó mis instrucciones. Cuando se elige cómo actuar lo más difícil no es distinguir entre el bien y el mal, sino aceptar las consecuencias de lo que corresponde. Ahí hay un inmediato efecto y lo más importante es rever nuestro comportamiento.
En este caso no hubo tiempo de reflexionar y tuvimos que intervenir instantáneamente. Nuestra reflexión estuvo condicionada por la educación, el ejemplo y seguridades. Quiero mencionar a mi madre, quien me enseñó a distinguir entre lo que está bien y lo que está mal. También a Newell's, el club al que pertenezco y en el que durante 20 años aprendí a vivir el fútbol de una forma particular. Hay razones permanentes en mi vida, como mi familia y mis amigos, que me recuerdan los valores que no deben ser olvidados. El fútbol, por su enorme impacto en estos tiempos, opera en algunas cuestiones de ética moral y está especialmente involucrado en algunas cuestiones. No es conveniente comentar en realidades que son imaginarias y no existen. Sin embargo, creo que la mayoría de los que elegimos tenemos el deber de hacer las cosas correctas. Con gran esfuerzo, mantendremos la igualdad y la decencia. Este reconocimiento que la FIFA que está dando esta noche es positivo porque reconoce el mismo comportamiento que algunos anónimos hacen todos los días. Marcelo Bielsa".