El vicepresidente segundo de Newell's, Cristian D'amico, quien fue atacado a balazos cuando estaba en su camioneta con su hijo el miércoles por la noche, dijo este domingo que los agresores fueron a "matarlo". "Sólo un milagro nos salvó", agregó.
El dirigente leproso volvió a expresarse a través de su cuenta de Twitter, algo que ya hizo este sábado, y publicó un mensaje que contrasta con una declaración realizada por el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, quien dijo que lo "apretó" un sector mafioso del club.
"Así quedó mi camioneta en la que estaba con mi hijo. Sólo un milagro nos salvó. Vinieron a matarme, no a amedrentarnos", señaló D'amico.
El mensaje está acompañado por fuertes imágenes del interior de su camioneta, que recibió varios disparos de arma de fuego desde un Renault Clio gris el miércoles pasado en Valparaíso y Montevideo.