La Copa de la Superliga comenzará a jugarse sin público como medida preventiva ante el avance del Coronavirus. La determinación se comunicó este jueves en virtud de los anuncios realizados por los gobiernos de cada provincia. En la Argentina habrá fútbol, aunque sin espectadores.
Desde la ciudad de Buenos Aires dieron el puntapie inicial y luego, el resto de los estados del país se plegó a la decisión de prevenir la concentración masiva de gente en los eventos. Tanto Newell's el domingo en Santiago del Estero como Rosario Central el lunes en el Gigante, jugarán a puertas cerradas.
Incluso, San Lorenzo de Almagro publicó en sus redes sociales un alerta. En un comunicado institucional, se les pidió a los hinchas que no vayan a recibir a los jugadores que se concentrarán en un hotel de Paraná antes de jugar ante Patronato este viernes.