Otro gran impacto en el Mundial de Qatar 2022. Si bien el que pasó es el subcampeón del mundo, el que se quedó afuera era el máximo candidato a ganar su sexta estrella para la gran mayoría. Croacia, con su corazón, con Modric y con su arquero héroe, está en semifinales y espera por Argentina o Países Bajos. Y el que vuelve a su casa es Brasil, con todas sus figuras.
El partido fue inolvidable. En los 90 y pico minutos de juego, empataron 0 a 0. Pero fue un trámite emotivo, con Brasil yendo al frente y chocando con la férrea defensa croata y con las manos del arquero Livakovic, que ya venía de ser figura ante Japón en octavos. Croacia, con la inteligencia de Modric y su corazón, también tenía chances de contra.
El partido se fue a la prórroga y cuando se moría la primera etapa de 15 minutos, apareció la magia de Neymar para convertir un golazo impresionante, yendo a buscar una pared dentro del área y definiendo en una baldosa a puro engaño. Parecía que el candidato de todos se metía entre los cuatro mejores.
Pero Croacia tenía algo más para hacer antes de dar por terminada la generación que la llevó a la final del mundo en Rusia 2018, con Modric y Perisic como abanderados. Cerca del pitazo final, Petkovic recogió un pase en la puerta del área grande y con un desvío que lo benefició, selló el empate para llevar la definición a los penales.
En la definición más infartante, Croacia fue donde estuvo más serena y no falló. Ejecutó cuatro penales y los marcó a todos. Y el arquero Livakovic hizo su trabajo atajando el primer y luego obligando a todos los ejecutantes a ajustar sus remates. Así fue como Marquinhos, el último en patear, estrelló la pelota en el palo y todo se acabó para Brasil en Qatar.
Los croatas desataron su festejo loco, como un dejá vu de lo ocurrido hace cuatro años en Rusia. Ya están en semifinales y ahora esperan por Argentina o Píses Bajos.
Para Brasil, la tristeza no tiene fin.