La dirigencia de Rosario Central avanzó en las últimas horas en la llegada de Pablo Álvarez como segundo refuerzo del plantel después de la contratación de Marco Ruben. El jugador estaba esperando (y desesperando) por la falta de novedades, pero según se informó en Zapping Sport "antes del fin de semana estaría en la ciudad para empezar la pretemporada".
La idea es hacerle a Álvarez, de 36 años, un contrato mínimo para darle una nueva oportunidad de insertarse en el fútbol argentino después de 21 meses sin jugar (último partido, 19 de abril de 2019 para Huracán ante San Lorenzo), aunque todos coinciden en que su nivel será mejor que el que mostró Jonathan Bottinelli, a quien junto a Alan Bonansea le rescindirán su contrato.
Hasta ahora, la única cara nueva es la de Marco Ruben pero persisten negociaciones como la de Jorge Broun. Por ahora está complicado el regreso de Fatura porque Rosario Central sólo desea hacerse cargo del contrato del arquero y evitar un gasto con Gimnasia, club en el que el portero milita.
En las últimas horas se sumó el nombre de Alexander Domínguez arquero suplente de Vélez. El ecuatoriano mide 1.95 y suele atajar para la selección de su país, datos que le gustan al Kily González.
Otra de las búsquedas de la dirigencia es la de un preparador físico tras la salida de Ernesto Colman: mientras Damián Hernández se hará cargo del inicio de la pretemporada, suena Guillermo Cinquetti (el ex PF de Miguel Russo) aunque en las últimas horas se sumaron otros candidatos.