El último sábado, el básquet argentino rindió un homenaje a la Generación Dorada, la selección que conquistó el oro olímpico en Atenas 2004 y protagonizó actuaciones épicas que marcaron al deporte nacional, más allá de la pasión por la naranja. El evento se desarrolló en Parque Roca y reunió a más de 15 mil personas.

Manu Ginóbili, Luis Scola, Andrés Chapu Nocioni, Fabricio Oberto, Pepe Sánchez, Alejandro Montecchia, Carlos Delfino, Walter Hermann, Leo Gutierrez, Rubén Wolkowiski y Hugo Sconochini fueron parte de la ceremonia.

Además, se llevó a cabo un partido amistoso entre dos selecciones argentinas, una vestida de blanco y otra de azul, de las que participaron tanto deportistas como figuras de otros ámbitos, como artistas, deportistas y celebridades. El resultado (anecdótico) fue 71-68 a favor del equipo blanco.

"Es difícil hablar en representación a otros once más, pero me animó a decir que van a sentir lo mismo que yo: no se puede creer esto. Cuando empezamos a hablar de hacer este evento, dijimos: «Quién mierda va a venir a vernos. Quién va a querer ver a 12 viejos jugando lento». Llegamos y vimos esto, te toca el corazón. Es realmente fuerte", dijo manu Ginóbili.

Y agregó: "Cuando uno piensa y empieza a digerir que esto ya pasó, que uno no lo va a vivir más, que se retiró, que nunca más va a poder tener este tipo de afecto…Y venir acá, sentirlo de esta manera, es fuerte. Les agradezco en nombre de todo el equipo enormemente, esto no pasa en todos lados. Pasaron 20 años y están acá. Un millón de gracias a todos, estamos conmovidos. Felices. Teníamos dudas, esto es impagable".

A la lista de jugadores mencionados se sumaron – de manera temporal– al partido que disputaron los dos equipos e Paula Pareto, Juan Martín del Potro, Germán Chiaraviglio, Marcos Milinkovic, Duki, Luquitas Rodríguez, Paulo Londra y Germán Beder, entre otros.

Asimismo, en los entretiempos hubo torneo de triples, videos con mensajes por las pantallas del estadio y un show musical de Coti.  El momento más emotivo llegó en el último cuarto, cuando los hijos de la Generación Dorada entraron a la cancha para jugar con sus papás.

Hasta Gregg Popovich, entrenador de san Antonio Spurs, se sumó al homenaje con un mensaje para la generación Dorada y, en especial, para Manu Ginóbili: “Lo que lograron no va a suceder nunca más en ningún lugar. Todavía estoy tratando de entender cómo se dio que todos ustedes coincidan. La rompieron, se lo merecían".