La aceitera Vicentín hizo este lunes una presentación en los Tribunales de Reconquista para pedir su concurso preventivo de acreedores.
La empresa, que en diciembre pasado cerró sus plantas de molienda y aludió a una situación de estrés financiero para dejar de pagar deudas acumuladas por unos 1.300 millones de dólares, hizo la presentación ante el Juzgado de Primera Instancia Distrito 4 en lo Civil y Comercial de Reconquista.
La compañía sostuvo en un comunicado que “perseguirá sin descanso, aún en este contexto, sus objetivos prioritarios de defender sus fuentes de trabajo, rehabilitar su operatoria industrial y comercial y concretar una restructuración de sus pasivos en condiciones y términos que sean mutuamente fructíferos para acreedores y para la empresa”.
Vicentín había lanzado hace un par de semanas una propuesta de pago a los productores, acopios, corredores y cooperativas que le entregaron granos y no llegaron a cobrarlos. Pero la misma no prosperó y el jueves pasado, en los Tribunales de Rosario, se presentó el primer pedido de quiebra de la firma que nació en el norte santafesino hace casi cien años. Lo hizo la firma Gagliardo Agrícola Ganadera SA, que pertenece al grupo de la Constructora Obring.
Ese pedido, dijeron fuentes judiciales, podría derivarse a Reconqusta, teniendo en cuenta que Vicentín radicó su domicilio fiscal en Avellaneda, distrito que pertenece al Departamento de General Obligado en el noreste de la provincia de Santa Fe.
En diciembre pasado, Vicentín anunció que enfrentaba una cesación de pagos con sus proveedores debido a un “estrés financiero”. Sus compromisos comerciales adeudados con privados rondan los 350 millones de dólares y con bancos por otros 900 millones de dólares.
A todo esto hay que agregar la deuda de la empresa con el Banco de la Nación Argentina, a partir del otorgamiento de un crédito que superó los 18.300 millones de pesos.