El diputado nacional Marcos Cleri se reunió con el referente de la Cámara de Empresas Pyme Regionales Elaboradoras de Biocombustible (Cepreb), Federico Pucciarello.
Al finalizar el encuentro, el legislador nacional sostuvo que “hay que defender las pymes de biocombustible que generan empleo y cuidan el medio ambiente".
“Se trata de una actividad con mucho desarrollo en nuestra provincia, que tenemos que defender y respaldar para seguir generando empleo”, expresó el diputado nacional.
Por otra parte, sostuvo que “la producción de biodiesel venía creciendo y avanzando hasta que el actual gobierno nacional, a través del Ministerio de Energía, resolvió priorizar los intereses de las grandes exportadoras, que operan con precios muy por encima de los fijados a las pymes del sector; y que ocupan a miles de trabajadores en Santa Fe y otras provincias”.
“Nosotros seguimos construyendo una agenda en común con las pymes que generan trabajo, que motorizan las economías regionales. Creemos en un Estado que priorice estos objetivos, que ponga la mirada y las políticas públicas en las necesidades de la gente para continuar la construcción de una patria con producción, con industria, con empleo, con justicia social”, resaltó Marcos Cleri tras el encuentro con Pucciarello.
“Las plantas de biodiesel están paralizadas hace casi un mes y esto pone en gravísimo riesgo las fuentes de trabajo y la producción de un tipo de combustible que es promovido por leyes nacionales fijando porcentajes de comercialización que no se están cumpliendo”, añadió el legislador santafesino.
“Nuestro compromiso es trabajar en conjunto con que todos los sectores industriales y productivos, coordinando esfuerzos e instrumentando políticas públicas conjuntas entre los distintos niveles de gobierno”, dijo también Marcos Cleri.
Las empresas del sector de biocombustibles vienen manifestando su preocupación por el impacto de la crisis y señalan que las políticas nacionales priorizan a petroleras y no a los pequeños y medianos productores.
Las compañías del rubro, en su mayoría pymes, recordaron que emplean en forma directa a unas 60 mil familias, en Santa Fe y en otras nueve provincias. Los industriales señalaron que están trabajando a pérdida y hay empleos directos en riesgo.