El empleo registrado cayó en febrero en términos netos por tercer mes consecutivo, al ceder un 0,3% frente a enero, de acuerdo a la información que brinda la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) publicada este jueves por la Secretaría de Trabajo. Se trata de la mayor baja para ese mes desde el año 2002.
Así, la contracción alcanzó un 0,9% entre noviembre de 2023 y febrero de 2024. En términos interanuales, el nivel de empleo asalariado registrado mantuvo un incremento de 0,1%, prácticamente estancado.
En tanto, el poder adquisitivo de los salarios cayó casi 24% en el mismo período y el sueldo promedio quedó por debajo incluso de los registrados durante la crisis post 2021, de acuerdo con los datos del último índice Ripte.
Caída del empleo en todos los sectores productivos
De acuerdo al informe, en febrero de 2024 todas las ramas de actividad experimentaron una contracción, y fue el sector de la construcción el que presentó la mayor caída mensual del empleo, con un 1,3% y un 11,2% acumulado en la medición interanual. El resto de los sectores presentaron descensos mensuales más moderados y mantuvieron un ínfimo crecimiento interanual.
Según datos de la Encuesta de Indicadores Laborales, las contrataciones de personal alcanzaron el 1,6% en febrero y las desvinculaciones 1,9%. Sin embargo, "la incidencia de los despidos en el empleo registrado privado es menor a la de los últimos tres meses e igual a la de febrero del año pasado". En cambio, el apartado de incorporaciones presentó un "nivel bajo", similar a febrero de 2020 y 2021 durante la pandemia.
"Este comportamiento resulta habitual en contextos de caída de la actividad económica. El nivel de empleo se ajusta principalmente a partir de la reducción de las incorporaciones de personal y no tanto por el aumento de las desvinculaciones, ya sean decididas por las personas o por las empresas", resalta el informe.
La retracción en el nivel de empleo registrado privado se observa también en las empresas de todos los tamaños, con variaciones que van de -0,2% a -0,4%. Las más afectadas, señala el informe, son las de entre 50 y 199 personas ocupadas –mipymes–.
En cuanto a la región con mayor caída de empleo, en el aglomerado del Gran Buenos Aires se observa una mayor reducción de los puestos de trabajo (-0,4%), mientras que en el conjunto de los aglomerados del interior del país la caída fue moderada (-0,1%).