"Las medidas con las que el gobierno busca evitar los posibles cortes de suministro en el verano combinan estrategias para aumentar la oferta y reducir la demanda, basadas en incentivos económicos y soluciones tecnológicas rápidas. Si bien estas acciones representan una solución inmediata ante la crisis de cortes eléctricos, el problema estructural de la falta de inversión en infraestructura energética sigue siendo el factor subyacente", señala el especialista en el mercado energético, Alberto Rosandi. "El gobierno debe continuar promoviendo políticas que refuercen la capacidad instalada y modernicen el parque de generación para evitar escenarios similares en el futuro", agrega el titular de la consultora Eiys y asesor de la Federación de Industriales de Santa Fe (Fisfe).

Rosandi elaboró un completo informe sobre las medidas que adoptará el gobierno ante la situación energética actual en Argentina, caracterizada por la alta demanda estacional y la falta de inversión en infraestructura energética. Y según las fuentes que revisó, identificó tres medidas clave que el gobierno implementará, respaldadas por una justificación técnica que refuerza su necesidad y eficacia en la mitigación de los cortes de luz masivos que el gobierno salió a advertir. Y esto lo que concluyó el experto:

1) Remuneración adicional a generadoras termoeléctricas Se otorgará una remuneración extra a las plantas termoeléctricas que operan con equipos antiguos, como los de Pampa Energía, Central Puerto, YPF Luz, y otros actores relevantes. Esta medida busca incentivar la operatividad de máquinas de vapor, motores y turbinas de gas de mayor antigüedad, que tienden a fallar más frecuentemente que las más modernas.

La falta de mantenimiento en estos equipos es una de las causas principales de los cuellos de botella en el suministro eléctrico durante picos de demanda. La remuneración adicional ayudará a asegurar entre 300 y 500 MW adicionales, contribuyendo a mejorar la confiabilidad del sistema.

La justificación técnica de la medida es que la generación térmica limitada o fuera de servicio actualmente suma aproximadamente 6.590 MW. Si no se implementa este incentivo económico, una porción significativa de esta capacidad continuará fuera de operación, exacerbando los riesgos de cortes durante los momentos críticos del verano.

2. Compensación económica para grandes usuarios Las grandes industrias, como las siderúrgicas, petroquímicas y metalmecánicas, recibirán compensaciones si reducen su consumo durante los días de alta demanda. Este mecanismo permitirá a los grandes usuarios convertirse en agentes de generación temporal, recibiendo un pago por ceder su energía contratada a la demanda prioritaria, en lugar de consumirla. El valor de esta compensación estará basado en el costo de generación con gasoil, que oscila entre 200 y 300 USD/MWh.

La justificación técnica de esta medida es que no solo alivia la presión sobre el sistema eléctrico en momentos de máxima demanda, sino que también ofrece un esquema rentable para los grandes usuarios al reconocer el valor del ahorro energético durante los picos de consumo, reforzando la estabilidad del suministro

3. Instalación de unidades de generación móviles (UGEMS) Se promoverá la instalación de unidades móviles de generación en áreas críticas, particularmente en las redes de distribución de Edenor y Edesur en Buenos Aires. Estas unidades utilizarán gasoil, y el Estado se hará cargo del costo del combustible. Estas plantas móviles ayudarán a suplir la energía durante los momentos de mayor exigencia, especialmente en áreas con riesgo de saturación de la red.

La justificación técnica es que los generadores que se incorporarán a la programación del despacho energético a nivel estacional, mensual y semanal, y se reconocerán únicamente los costos variables (combustible). Esto permitirá una respuesta rápida y flexible ante situaciones de emergencia, cubriendo déficits temporales sin comprometer el largo plazo

Contexto delicado

"El riesgo de cortes de suministro para el próximo verano es alto si nos enfrentamos a niveles de temperatura elevados y prolongados, y solo mediante una combinación de medidas técnicas y económicas se podrá mitigar este riesgo. El contexto económico desafiante, junto con la falta de inversiones, complica aún más la situación, requiriendo una acción coordinada y decidida por parte de todos los actores involucrados", había advertido Rosandi hace 15 días en el marco de su exposición en el Encuentro "+ Producción", organizado por el Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario y el Instituto de Desarrollo Regional (IDR) sobre parques productivos.

Rosandi expuso una panorama del sector energético en el Evento "+Producción".

Sobre la base en documentación de Cammesa, incluyendo informes oficiales y comentarios de especialistas en el sector energético, Rosandi expuso cinco puntos con las condiciones Económicas del mercado energético para el próximo verano.

1) Contexto y Proyecciones de Demanda. De acuerdo con el informe de Cammesa, se espera que la demanda de energía eléctrica en el verano próximo alcance niveles récord, superando los 30.700 MW. Este valor es significativamente superior al récord anterior de 29.653 MW registrado en febrero de este año.

La principal preocupación es que la oferta de energía, incluso considerando las importaciones y la plena utilización de las reservas operativas, no será suficiente para cubrir esta demanda, lo que llevará inevitablemente a cortes de suministro si no se toman medidas de contingencia inmediatas. El informe subraya que la alta demanda prevista se debe principalmente a las olas de calor intensas y prolongadas, que en años anteriores han llevado a situaciones críticas en distintas regiones, principalmente grandes urbes, donde se registraron hasta seis olas de calor y 21 días consecutivos con temperaturas superiores a 25°C.

2). Indisponibilidad y Mantenimiento de Centrales de Generación Uno de los factores críticos es la indisponibilidad de varias centrales de generación, especialmente térmicas y nucleares. La situación es particularmente grave en el caso de Atucha I, que debería de entrar en parada para un mantenimiento prolongado relacionado con la extensión de su vida útil, lo que retirará 362 MW del sistema.

Además, se observa una creciente preocupación por la falta de fondos para realizar mantenimientos preventivos y reparaciones en el parque termoeléctrico. Esta falta de mantenimiento ha llevado a un incremento en la indisponibilidad de las centrales, lo que agrava el riesgo de no poder satisfacer la demanda durante los picos de consumo. La capacidad de generación térmica proyectada para el próximo verano es de 15.828 MW, que junto con los aportes de las centrales hidroeléctricas, renovables y nucleares, no serán suficientes sin recurrir a importaciones y a la utilización de reservas operativas.

3). Saturación de Estaciones Transformadoras y Transporte Eléctrico La saturación de las estaciones transformadoras y las redes de transporte eléctrico es otro factor clave que podría llevar a cortes de suministro. La situación actual del sistema de transporte es crítica, con muchas líneas y estaciones operando al límite de su capacidad.

Esto no solo limita la capacidad de respuesta ante fallos o indisponibilidades en la generación, sino que también aumenta el riesgo de colapsos en el sistema en situaciones de demanda máxima. En caso de que se presente una indisponibilidad adicional en la oferta o el transporte de energía, será necesario realizar cortes de suministro para mantener la estabilidad del sistema. Esto se debe a que el sistema operará bajo condiciones de "n-1", donde la salida de servicio de un solo elemento crítico (como una línea de transmisión) podría desencadenar un déficit en la capacidad de abastecimiento.

4) Condiciones Económicas y Tarifarias. Desde el punto de vista económico, el contexto es complejo. El gobierno argentino enfrenta el desafío de equilibrar las tarifas eléctricas con la necesidad de reducir los subsidios sin desencadenar un rebote inflacionario.

La actualización tarifaria del 1º de septiembre, que incluye aumentos en el Valor Agregado de Distribución (VAD), el margen de transporte y el precio estacional de la electricidad, refleja este delicado equilibrio. El aumento en las tarifas residenciales del 4% busca evitar un impacto negativo en la inflación, que sigue siendo una de las principales preocupaciones del gobierno.

Sin embargo, estos incrementos pueden no ser suficientes para cubrir las necesidades financieras del sector eléctrico, especialmente en lo que respecta al mantenimiento y renovación del parque generador. Además, la suba del 5% en la remuneración de las generadoras sin contratos con Cammesa es una medida que intenta mitigar el riesgo de aumento en la indisponibilidad de las turbinas y motores de generación, evitando así un mayor deterioro del parque de generación de cara al verano.

5) Impacto en la Economía y Riesgo de Cortes. El incremento en las tarifas, aunque necesario, podría no ser suficiente para evitar los cortes de suministro. La falta de inversión en mantenimiento y la limitada capacidad de importación de energía se combinan para crear un escenario de alto riesgo.

Si el gobierno no logra implementar medidas de contingencia efectivas, como la reactivación de proyectos de generación y la optimización del uso de las reservas operativas, es probable que se enfrenten a cortes masivos durante los picos de demanda del próximo verano.

El informe de Cammesa destaca que, incluso con la máxima importación posible (2.500 MW), será necesario operar con reservas reducidas, lo que aumenta la probabilidad de situaciones de "Energía No Suministrada". Esto tendría un impacto significativo no solo en la confiabilidad del sistema eléctrico, sino también en la economía, ya que los cortes de suministro afectarían directamente la productividad industrial y comercial, exacerbando las dificultades económicas actuales.