El frigorífico Swift decidió parar sus plantas de Rosario y Venado Tuerto y darle vacaciones a partir del lunes a todo el personal a raiz del impacto de la falta de la hacienda. La medida involucra a 2.500 personas y no hay fecha de reintegro a las tareas.
Ante la consulta de Rosario3, fuentes de la compañía informaron que “atento a que el costo de la hacienda se incrementó en pesos más del 50% en las últimas semanas, la reciente devaluación del 22% y la fuerte caída del precio internacionales, hoy es inviable concretar negocios de exportación".
El 70% de la producción del Swift tiene destino al mercado externo, pero -según confirmaron a Rosario3 fuentes de la firma- ni los clientes extranjeros o el mercado interno pueden absorber semejantes aumentos, y por eso decidieron parar la producción.
"El personal saldrá de vacaciones en primera instancia”, confirmaron primero en off desde la firma. Y luego de que se publicara la información en los medios, la firma emitió un comunicado oficial en el que señala que las vacacione serán hasta el 28 de agosto.
"Este procedimiento ha sido realizado en más de una oportunidad, siendo la última en diciembre de 2022, y atiende exclusivamente a características del ciclo productivo del sector", dijeron luego de insistentes comunicaciones desde el gobierno nacional.
"La empresa también informa que en el día de hoy se ha reunido con el gobierno ratificando su compromiso con el programa de precios justos, como lo ha hecho desde el comienzo del mismo", agregó.
Ahora, si para cuando vuelvan de las vacaciones, el problema sigue la empresa podría recurrir a una figura que tiene el convenio colectivo del sector que es la de "garantía", por el cual el trabajador cobra el 70% del salario
En consonancia con Swift, otras compañías del rubro cuales operan dentro de la formalidad, estarían atravesando una situación similar, y comenzarían a aplicar medidas similares en la semana próxima.
"Según el gobierno nacional el precio del dólar oficial se mantendrá estable hasta octubre, y los precios internacionales no dan señales de ir al alza en forma sustancial, por lo que el panorama no es alentador en el mediano plazo para la industria exportadora", sostuvieron fuentes de la firma.
El precio de la hacienda estaba contenido por la sequía, que llevaba a que los ganaderos se vieran obligados a vender por la falta de alimentos para las vacas. La llegada de las lluvias generó que baje el stock que sale a remate y subieran los precios. Y, finalmente, por la devaluación, los precios subieron fuertes y se retrajeron aún más las ventas.
El negocio frigorífico viene bajo tensión en la relación con el gobierno entre presiones de cierre por exportaciones y acuerdos de precios
El golpe al sector de frigoríco se sucede luego de que ayer todas las plantas del biodiesel anunciaran que dejaron de producir porque la devaluación disparó sus costos.