En medio del naciente debate sobre quiénes (y cuánto) podrían pagar un impuesto a la riqueza o a las ganancias extraordinarias en Argentina, como forma de financiar la crisis sanitaria y económica que desataron el coronavirus y el aislamiento, un estudio de economistas locales le puso números concretos a esa discusión.
El Mirador de Actualidad del Trabajo y la Economía (Mate) entendió que en tiempos de pandemia es importante analizar a qué sectores alcanzaría un eventual gravamen a la riqueza, que suele quedar invisibilizada y fuera del debate público.
La serie de datos que componen el informe es elocuente. Mientras que al menos el 35 por ciento de la población es pobre (más de 15 millones de argentinos y argentinas), “unas 45 mil personas, es decir el 0,1% de la población, declaran poseer una riqueza total de 107 mil millones de dólares”.
“Ese 0,1%, declaró tener el 66% de su riqueza fuera del país. En el extremo, las 6.000 personas más ricas, que en promedio declararon una riqueza de 10 millones de dólares cada una, tienen el 80% de su capital radicado en el exterior”, indica el documento.
De regreso al eje del tema principal, el grupo de economistas e investigadores liderado por el profesor Sergio Arelovich (UNR) pone la luz sobre los ganadores de la economía nacional de los últimos años, entre ellos los bancos, ahora señalados porque no facilitan los créditos a una tasa de 24% para las Pymes como acordaron con el gobierno nacional.
“En 2019, diez bancos privados ganaron nada menos que 224.000 millones de pesos, multiplicando por 8 la ganancia que habían tenido en 2015. Un conjunto de 8 empresas privadas del sector energético ganó más de 90.000 millones de pesos, multiplicando por 10 la ganancia de 2015”, señala.
El estudio de Mate analiza: “Si sólo el 0,1% de las personas que acumulan mayor riqueza pagara un impuesto correspondiente al 1,25% de su patrimonio declarado en el país y el 1,75% sobre su patrimonio declarado en el extranjero, se podría recaudar $100.000 millones”.
“Si –continúa–, el impuesto fuera pagado por el 1%, la recaudación ascendería a $160.000 millones. En el primer caso, el 99,9% de la población no debería pagar un peso. En el segundo, la población exenta alcanzaría al 99%”.
En el caso de las empresas, como el impuesto a las ganancias de las sociedades establece el pago máximo del 35%, se podría avanzar con un “extra del 10% sobre el resultado final de las que hayan ganado más de un millón de dólares en Argentina”, lo que “generaría un ingreso superior a los $235.000 millones”.
Si se implementan ambos tributos, el Estado nacional podría sumar a sus flacas arcas –consecuencia del parata económico y el descenso de la recaudación– unos 400 mil millones de pesos, siempre según el informe de Mate, elaborado sobre datos oficiales.