Un joven de 31 años fue hallado muerto este miércoles entre los pastizales de un terreno ubicado en Jauretche al 6900, lindero a una distribuidora de golosinas cuyo ingreso está a metros de Presidente Perón y Circunvalación, en la zona oeste. Si bien en principio se barajó la hipótesis de un crimen, la autopsia no arrojó signos de violencia en el cuerpo.

El fiscal confirmó que la víctima era buscada por familiares que se presentaron en la escena. (Alan Monzón/Rosario3)

Detectives de la División Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) y peritos trabajaron desde temprano en el lugar, separado por un alambrado del predio de estacionamiento de la distribuidora Tyna. También estaba presente el fiscal Adrián Spelta, quien brindó una conferencia de prensa.

La noticia llegó a personas que, en diálogo con la prensa, contaron que buscaban a un allegado al que no veían desde hacía tres días, por lo que estaban expectantes de las novedades hasta que tuvieron acceso al cuerpo y confirmaron que se trataba de la persona que buscaban.

Alan Monzón/Rosario3

El acceso al terreno se encuentra por Jauretche y Ricardo Lagos, en el barrio Godoy, donde hay un precario alambrado con un palo que oficia de portón. Para acceder, los investigadores ingresaron por el estacionamiento de la distribuidora Tyna, ya que solo debieron saltar un alambrado.

Por la tarde, se realizó al autopsia al joven, identificado como Franco Rubén S., y se estableció que murió hace aproximadamente tres días y que el cuerpo “no presenta golpes o heridas de ningún tipo”, así como “tampoco se hallaron rastros de ahorcamiento”, detallaron fuentes de la investigación.

En ese marco, precisaron, “todos los indicios dan cuenta de un fallecimiento por causas naturales” y “el líquido hallado en cuerpo no era sangre sino líquidos propios del cuerpo expuesto por el paso de los días”.