Un vuelo se demoró una hora y media en salir por el pedido de siete pasajeros que retiraron su equipaje y abandonaron el avión cuando se dieron cuenta de que las pilotos eran mujeres; un pasajero argentino relató lo sucedido.
El lunes a la noche, Marcos Martínez, su esposa y sus dos hijas se subieron al avión 909 de American Airlines que estaba pautado para salir a las 20 de Miami, Estados Unidos, hacia el aeropuerto de Ezeiza, en Buenos Aires. El avión estaba casi vacío y cuando se hacían las 20, Marcos, su familia y los demás pasajeros se empezaron a impacientar.
"Eran las 8 menos 5 y el avión estaba bastante vacío. Como no se movía, me acerqué a la azafata y le pregunté si estábamos esperando a alguien que tenía una conexión o algo por el estilo", relata Marcos ya en Buenos Aires. La azafata, según cuenta, le dijo que generalmente no se espera a nadie, pero que se quedara tranquilo que dentro de unos minutos el avión iba a despegar.
A la hora y media hicieron todos los rituales de rutina anteriores al despegue y nadie se había dado cuenta de lo que había sucedido previo a la salida del aeropuerto de Miami. "Cuando estábamos en vuelo el comandante de abordo menciona en un mensaje a través del megáfono algo en relación a la piloto y la copiloto", señala Marcos. "Ahí nos dimos cuenta de que eran mujeres y la gente se sorprendió", añade.
Cuando 7 pasajeros se enteraron de que la piloto y la copiloto eran mujeres, se quisieron bajar, hubo que sacar sus valijas y eso demoró la salida del vuelo.
"El vuelo continuó normalmente y después uno de los tripulantes de cabina, de habla-hispana, me comentó que cuando siete pasajeros se enteraron de que la piloto y la copiloto eran mujeres, se quisieron bajar, hubo que sacar sus valijas y eso demoró una hora y media la salida del vuelo", comenta Marcos con una mezcla de indignación y sorpresa.
Si bien no llegó a ver a los personas que decidieron bajarse y no conoce el género ni la nacionalidad, asegura que apenas se enteraron de esta noticia comenzaron a comentar entre los pasajeros asiento a asiento. "Qué raro que se hayan bajado, ¿por qué lo habrán hecho?", era la frase que más se escuchaba en el aire de ese vuelo, que fue testigo de un hecho insólito que quedará impregnado en la memoria de todos los que estaban a bordo.