Cuando la fuga de los condenados por el triple crimen de General Rodríguez acaparaba toda la atención de la agenda mediática, sucedió un extraño hecho cerca de Rosario: un llamado al 911 dio aviso de un supuesto plan de fuga por parte de presos de la cárcel de Piñero. Se llevaron a cabo medidas para investigar el posible hecho, se secuestraron celulares y hubo traslado de internos, entre ellos uno de los líderes de la banca narco criminal Los Monos.
El anónimo que registró el 911 alertó el jueves de la pasada semana sobre un supuesto intento de escape de internos del penal de Piñero. Sin especificaciones sobre quiénes serían los presuntos autores intelectuales del plan, desde el Servicio Penitenciario provincial se realizó una requisa celda por celda que concluyó con el saldo de ocho celulares incautados. La fiscal del caso, Karina Bartocci, apuntó diez, según publicó El Ciudadano, más un chip oculto en una pasta de dientes. Ningún móvil –aclaró la funcionaria a ese medio– en poder de Ariel Máximo Cantero, aunque allegados al caso consultadas por Rosario3.com, confirmaron que al menos uno de los celulares estaba en manos de “Guille”.
Cantero, que estaba en el pabellón nº 7 fue entonces trasladado al nº 5. Además, hubo traspaso de internos que estaban en el nº 5 al nº 7, con la idea de aislarlos entre sí.
¿Qué hacían los internos con celulares en la cárcel? La pregunta es recurrente. Según comentó una fuente a este medio, algunos presos tienen teléfonos “para poder conversar con sus familiares”. Sin embargo, en más de una oportunidad se denunció que los móviles se utilizan para continuar con operaciones ilegales, incluso integrantes del clan Cantero.
En este caso, los teléfonos incautados fueron enviados a la Fiscalía Regional Circunscripción Rosario para que sean sometidos a los peritajes correspondientes, cuyos resultados podrían estar listos para el fin de esta semana o para el comienzo de la siguiente.
Desde el Ministerio de Seguridad indicaron a Rosario3.com que el hecho puede deberse a "intereses que hacen circular algunos internos", por lo que minimizaron la probabilidad de un plan de fuga pero confirmaron la existencia de una investigación sobre el tema.