La Defensoría del Pueblo de Buenos Aires pidió a Google y YouTube que eliminen de la web los contenidos que vulneran los derechos de un adolescente con residencia en territorio bonaerense. Se trata de Juan Sánchez, el joven que en junio de este año dio una nota y se convirtió en el blanco de las burlas por la forma en la que pronunció “Me gusta el arte” y “Liniers”, en referencia al conocido dibujante. El propio Liniers se sumó luego a una campaña en apoyo al joven por tal injusto trato. La familia del niño había denunciando que por los videos, Juan comenzó a ser víctima de ciberacoso.
Según informó la Defensoría de Buenos Aires, se solicitó que se borre todo el contenido relacionado al chico porque afecta la intimidad, imagen, dignidad y honor del menor, por los cuales padece un sistemático hostigamiento a través de las redes sociales.
El joven sufre desde hace meses hostigamiento en la web desde que se publicó una nota televisiva donde él aparece y habla ocasionalmente, y que disparó cientos de ridiculizaciones en videos, imágenes, graffitis y hasta en merchandising con su cara.
El ciberacoso llegó a tal punto que trascendió el espacio virtual para instalarse en la vida cotidiana del chico y su familia, que no pueden salir a la calle sin que se acerquen los "fans" a solicitarles una foto o una "selfie", se detalló.
El secretario general a cargo de la Defensoría, Marcelo Honores, consideró que la "desmedida" exposición del adolescente "exige una urgente intervención de tipo moral y humana". "Es nuestra tarea velar por los derechos de las personas, en especial de los más débiles, en este caso un niño", explicó.
En tanto, Mónica Bornia, coordinadora de la Secretaría General y del equipo interdisciplinario sobre hostigamiento escolar de la Defensoría, consideró que "no se trata de un reclamo de naturaleza jurídica, sino de un imperativo humano y moral, el cual busca proteger y garantizar los derechos del adolescente".
La presentación ante Google y Youtube apela a la cooperación de quienes manejan los principales buscadores de Internet y establece una orientación hacia la salvaguarda y reconocimiento de los derechos y la dignidad de los niños, niñas y adolescentes.
La Defensoría entiende que "aunque el daño ya fue causado y el sufrimiento del adolescente no se puede reparar, la manera en que la web representa a este niño ejerce un profundo impacto a nivel social y personal".
Por lo tanto, intimó a las empresas de Internet a "eliminar los contenidos agraviantes para lograr la restitución de derechos del chico y su familia".