-Tasa de mortalidad por tumores por cada 100 mil habitantes, según departamento de residencia habitual.
-Fuente: Dirección General de Estadística de Salud. Ministerio de Salud de la Provincia. Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (Ipec).
La percepción de los vecinos de varias localidades de la provincia sobre el incremento de los casos de cáncer tiene su correlato en las cifras que se manejan en ámbitos universitarios, en base a trabajos de campo realizados en las poblaciones. Las estadísticas oficiales del gobierno provincial indican que los tumores son la segunda causa de muerte en Santa Fe y que los departamentos que registran una mayor tasa de mortalidad por la enfermedad tienen una intensa actividad agroindustrial.
Distritos del sur sojero, como Caseros e Iriondo, superan el pico de 250 muertes por cada 100 mil habitantes, mientras que en el norte, 9 de Julio o General Obligado no llegan a 140 (ver mapa).
Mientras algunos especialistas analizan que la aparición de tumores tiene relación con el modelo productivo que en los últimos 20 años expuso a la población a las fumigaciones con agroquímicos, desde el Ministerio de Salud de Santa Fe asumen que tema comenzó a ser “un problema” sanitario en las últimas décadas. Pero aclaran que se trata de algo “multicausal” y no únicamente asociado a la contaminación del medio ambiente.
Los números
En la provincia, los tumores son la segunda causa de muerte detrás de las enfermedades cardiovasculares y por encima de las afecciones respiratorias y las causas externas (accidentes, homicidios y suicidios). Los 11 departamentos santafesinos que superan la media provincial están en el centro y sur del territorio y los de mayor tasa de mortalidad por cáncer son Caseros, Iriondo y Constitución.
Según datos oficiales del Ministerio de Salud de Santa Fe, en el cordón industrial las localidades de Capitán Bermúdez y San Lorenzo tienen mayores índices de casos de cáncer registrados en general.
La misma estadística muestra que, en particular, Capitán Bermúdez supera la media nacional de muerte por cáncer colorrectal y en San Lorenzo se duplica la tasa de mortalidad por cáncer de páncreas, en comparación con la media del país.
Un estudio sanitario sobre la situación de cáncer en Santa Fe publicado en la web del gobierno provincial analiza que “la ocurrencia de muertes prematuras asociadas a los tumores es un hecho llamativo en las localidades de San Lorenzo y Capitán Bermúdez. En esta última, la incidencia de los tumores colorrectal significó un evento a destacar”.
Los encargados de la estadística aclaran que para el análisis es necesario el uso de tasas ajustadas para comparar entre poblaciones con distinta estructura de edad.
A nivel nacional, los tumores malignos constituyen la principal causa de muerte entre los 40 y los 64 años, la segunda en los grupos de 5 a 39 años y también en mayores de 64. Sin discriminar por sexos, el más frecuente fue el de pulmón, seguido por los de colon y recto, mama y próstata.
-Fuente: Ministerio de Salud
El medio ambiente, los agroquímicos y el modelo productivo
“Hemos estado recorriendo localidades santafesinas de menos de 10 mil habitantes con campamentos sanitarios y en casi todas ha habido un crecimiento exponencial de los casos de cáncer año a año. Ese aumento es coincidente con los cambios en el modelo de producción”, explicó a Rosario3.com Damián Verzeñassi docente de la cátedra de Salud Socio Ambiental de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). Para el investigador universitario el uso de agrotóxicos no es el único factor que determina la suba en las tasas de morbi-mortalidad pero “nadie puede negar el impacto que tiene la exposición a las sustancias agrotóxicas”.
Para fundamentarlo, Verzeñassi acude a los relevamientos hechos en 22 pueblos donde estuvo realizando intervenciones casa por casa con estudiantes de los últimos años de la carrera de Medicina. “En 2008 a nivel nacional se registraban 206 casos nuevos de cáncer cada 100 mil habitantes. El promedio de las 22 localidades santafesinas a las que asistimos fue de 368 casos cada 100 mil habitantes, con un pico de 715 en María Susana. Es decir, que en general en la provincia se duplica la media nacional y en algunos lugares hasta se triplican los números”, detalló.
Por otra parte, el docente de la UNR aseguró que mientas “históricamente los casos de cáncer eran habituales en franjas de población que van de los 65 a 70 años, ahora empiezan a aparecer entre personas que tienen entre 20 y 40 años”.
La Multisectorial Paren de Fumigarnos, una organización de vecinos de diferentes localidades de la provincia que exige una ley que limite las fumigaciones con agroquímicos a 800 metros de las zonas pobladas, espera que la Legislatura santafesina sancione una norma que proteja “la salud de los que están más cerca de las fumigaciones”. El tema podría tratarse en la Cámara de Diputados en la próxima sesión, ya que este jueves se pospuso. Los bloques mayoritarios tendrían consensuada una prohibición de fumigar a 200 metros de los pueblos, una distancia bastante menor de la que piden desde la ONG.
Los integrantes de la multisectorial no dudan de los efectos nocivos del uso de agroquímicos en la salud de las personas. “En el país hay 26 millones de hectáreas de cultivos transgénicos. Con ese modelo, pasamos de los 30 millones de litros de agroquímicos en la Pampa Húmeda en los años 90 a los 400 millones actuales. Santa Fe tiene 3,5 millones de hectáreas de transgénicos y 80 millones de litros de agrotóxicos, la mayoría en el centro y salud provincial”, graficó Daniel Romano, integrante de la organización de vecinos.
Problema “multicausal”
El Ministerio de Salud de la provincia define al “cáncer” como un conjunto de patologías y eventos que no son sumables porque incluye más de 200 enfermedades, desde tumores muy comunes como los de mama y pulmón hasta algunos “muy poco frecuentes” como los sarcomas. Las autoridades sanitarias santafesinas sostienen que “es real” el incremento de los casos desde –al menos– los años 70 y lo consideran “un problema de salud”. También sostienen que “es difícil establecer un nexo entre todos los tipos de cáncer con el medio ambiente”.
“El problema del cáncer es multicausal. Puede provocarlo algún factor del medio ambiente pero habría que determinar cuál y separar eso implicaría un estudio prospectivo muy difícil de hacer. Otros factores que influyen son la predisposición genética, los hábitos, si una persona fuma o no, si tiene vida sedentaria, la alimentación. Es un problema que no se puede definir por un patrón de incidencia o únicamente por el medio ambiente”, explicó Luis Fein, coordinador del Programa Provincial de Cáncer.
Glifosato: “El malo de la película”
Los representantes del área sanitaria de la provincia son cautos al momento de analizar el planteo de vecinos y organizaciones ambientalistas sobre la incidencia del uso de herbicidas como factor clave en el desarrollo de tumores. “Es difícil de afirmar que haya una relación directa pero también de negarlo”, responden.
“El glifosato –por mencionar uno de los agroquímicos más conocidos, al que le tocó ser el malo de la película– viene a ser la cara visible de un modelo de producción que ha avasallado formas de vida enteras: campos que tenían frutales o una diversidad de producción ahora sólo tienen soja. Por otra parte, la siembra directa nunca tuvo la rotación de cultivos que propiciaba porque la soja copó el mercado. Todo eso genera un cambio de vida que a la gente la afecta”, opinó Cecilia Moyano subdirectora provincial de Información Epidemiológica.
Agregó que si bien se han detectado problemas de salud vinculados a la exposición a las aplicaciones de agroquímicos, “ninguno ha sido grave y a nivel colectivo no ha significado una situación peor de una localidad a otra”. No obstante, la especialista aclaró que el área de estadísticas tiene una limitación: “Hay personas que no podemos captar porque se atienden en el sector privado que muchas veces ha sido reticente a entregar sus bases de datos”.
Moyano también sostuvo que “el cáncer viene aumentando de manera sostenida desde las décadas del 70 y el 80 y por lo tanto no es tan fácil atribuirlo directamente a este modelo de producción o a los agroquímicos”, que comenzaron a extenderse en la Pampa Húmeda en 1996.
“Algunas toxicólogas de Santa Fe sostienen que en la década del 60 y del 70 se utilizaban órganos fosforados para fumigar que eran mucho más tóxicos y que han quedado en la cadena de ADN de las personas y pasan de generación en generación. Por eso, cómo atribuirle al glifosato algo que en la cadena podría venir desde mucho antes”, aseveró.
El caso de San Jorge
Un estudio solicitado por la Justicia al Ministerio de Salud de la provincia para evaluar el impacto sobre la salud de las personas como consecuencia de la prohibición de fumigar con agroquímicos en una zona de la localidad de San Jorge, puso de manifiesto en mayo de 2011 que hubo “una disminución de las consultas” a los servicios de salud a partir del momento en que se limitaron las aplicaciones.
El estudio oficial demostró también que si bien “la disminución de la demanda fue para todos los motivos de consulta, resultó ser mayor para los grupos de afecciones potencialmente atribuibles a un «irritante externo» (de tipo dermatológicos, conjuntivales y respiratorios) en comparación al resto de los motivos de consulta”.
La investigación concluyó en que “no se pudo concluir de modo irrefutable que la disminución de las consultas se deba a la prohibición de fumigar. Puede que sí, como que no. No obstante, la hipótesis planteada parece ser bastante plausible”.
El cordón industrial
Los datos sobre el incremento de la mortalidad por tumores comenzó a ser una preocupación en los últimos años en el cordón industrial. En Capitán Bermúdez, donde los casos de cáncer colorrectal casi duplican la media nacional, los vecinos se organizaron y exigieron al gobierno local una serie de medidas preventivas que se materializaron la semana pasada con el lanzamiento de una campaña de detección temprana.
-Tasa por cada 100 mil habitantes. Fuente: Ministerio de Salud
Vecinos autoconvocados, el Taller Ecologista, Semillas de Futuro presentaron más de 2000 firmas para exigir “que el Estado proteja su salud”.
Cecilia Bianco, del Taller Ecologista, dijo a Rosario3.com que además de las campañas de prevención los vecinos quieren saber los motivos por los que las tasas de morbi mortalidad son más altas en esa localidad.
“Lo que se quiere conocer es si hay un factor ambiental, porque eso esta cada vez más presente en los informes, o si tiene que ver con la alimentación. Pero, ¿qué diferencia puede haber en los hábitos alimenticios de Capitán Bermúdez respecto de otras ciudades vecinas?”, se preguntó Bianco.
Consultados sobre el tema, los representantes del Ministerio de Salud de la provincia respondieron que los estudios de causa efecto para determinar si el cáncer tienen un origen vinculado a las condiciones ambientales, “son muy largos y caros”.
“Hasta que den resultados te perdés de desarrollar acciones preventivas de salud. Son muchos los factores que pueden estar provocando situaciones de cáncer. Lo que sí sabemos es que hay tumores prevenibles y acciones de salud pública para enfrentarlos y en esa dirección vamos. Los estudios epidemiológicos de causa efecto, no están siendo priorizados hoy en la provincia porque se da prioridad a la promoción y prevención de salud”, señaló Cecilia Moyano, subdirectora provincial de Información Epidemiológica.
-Tasa por cada 100 mil habitantes. Fuente: Ministerio de Salud
Infografías: Rosario3.com / Ezequiel Clerici