Un estudio que llevó a cabo la cátedra de Biología Marina de la Universidad de Buenos Aires (UBA) determinó que en la sangre de Franco Casco -el joven que apareció sin vida en el río tras ser intensamente buscado por sus familiares- no había una clase de alga que suele tener una persona que muere ahogada. De este modo, su deceso habría ocurrido antes de que su cuerpo caiga al agua.
En contacto con Rosario3.com, el defensor general, Gabriel Ganón, explicó que para que se comprobara que el fallecimiento de Franco Casco sea por ahogo “debía tener en su sangre diatomea, que es una especie de algas que se encuentran en el río Paraná”.
Además, Ganón sostuvo que se acota el margen de veracidad de la versión del fiscal Guillermo Apanowicz, quien sostuvo que no se hallaron “inconsistencias en los relatos de los policías, el responsable de la seccional y del libro de actas”. Cabe mencionar que el padre del joven señaló que el subcomisario le informó la detención de su hijo un lunes por la noche, y al otro día a la madre otro agente le mencionó que fue arrestado el martes al mediodía. “Desde el primero momento dijimos que lo mató la policía”, sentenció.
Franco Casco, de Florencio Varela, vino a Rosario a visitar a su familia y desapareció el pasado 6 de octubre. Lo último que se supo sobre él fue su detención en la seccional 7ª. Tras el pedido de familiares y allegados comenzó la búsqueda que finalizó con el hallazgo del cuerpo sin vida en el río Paraná.