El hijo del presidente de la Federación Española de Fútbol, Gorka Villar, implicado en la mega causa de corrupción que incluye el cobro de coimas por la organización de partidos internacionales de la selección española, recibió contrapartidas por más de 200.000 euros del fallecido ex presidente de la AFA Julio Humberto Grondona, según indica la resolución judicial que ordenó su ingreso a prisión a la que tuvo acceso Télam.

El juez de la Audiencia Nacional española, Santiago Pedraz, dictaminó la prisión sin fianza del presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, de su hijo Gorka, y del vicepresidente económico de la entidad, Juan Padrón, todos ellos acusados de haber orquestado una "trama de apropiación de fondos" para enriquecerse en perjuicio del órgano rector del fútbol en España. 

Tras tomar declaración a los detenidos, el magistrado adoptó la medida cautelar ante la "gravedad de los delitos" que se les imputan a Villar y su hijo, entre ellos, "administración desleal, apropiación indebida y/o estafa, falsedad documental y corrupción de particulares", lo que pudiera llevarles "a huir de la justicia debido a la gran capacidad económica de la que dispone", de acuerdo con la resolución publicada hoy. 

El saqueo de la RFEF -que supera los 100 millones de euros- podría conllevar penas de un mínimo de 9 años de cárcel, si se comprueban los delitos que se les imputan, de acuerdo con el sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda. 

El plan 

El magistrado detalla en su escrito que Ángel Villar, presidente de la RFEF, "creó un entramado que ha permitido la desviación de fondos" tanto públicos como privados a "sociedades vinculadas" estableciendo asimismo "un clientelismo" desde su cargo.

Según el juez, la red actuaba en diferentes niveles, abarcando desde "la contratación del personal" de las federaciones, "la adjudicación arbitraria de contratos de suministros y la prestación de servicios a empresas vinculadas -o directamente a través de familiares- a cambio de contraprestaciones.

De esta forma, Villar incumplió sus obligaciones como responsable de fondos de la RFEF y se aprovechó del puesto que ostenta desde hace 29 años para enriquecerse en connivencia con su hijo Gorka, quien pese a no tener ningún cargo en la federación, controlaba cada vez más el organismo presidido por su padre.

La investigación pudo determinar que las irregularidades se cometieron -al menos- desde 2009 en el ámbito de todo el territorio nacional, con conocimiento y colaboración de los principales dirigentes de la asociaciones de fútbol bajo investigación, entre ellas la Federación de Tenerife, cuyo secretario, Ramón Ángel Hernández Baussou, el cuarto detenido en la operación "Soule", fue enviado a prisión eludible bajo una fianza de 100.000 euros.

La ilegalidades atribuidas a Villar y sus cómplices en el escrito de 44 páginas son "numerosas y revelan la forma en la que el presidente de la RFEF compró los apoyos para mantenerse en el poder".

"Te tendrás que gastar 10 o 15 millones más", le dijo Gorka a su padre, al que asesoraba, según se desprende de una de las escuchas telefónicas del sumario, previa a una reunión en la que RFEF trataría el diseño de los nuevos órganos directivos.

El juez explica cómo Villar, que también es vicepresidente de FIFA, utilizó por su parte su influencia para beneficiar económicamente a su hijo a través de la sociedad que administra, Sport Advisers SL (asesoramiento jurídico-deportivo).

Gorka disponía de medios humanos y materiales de la RFEF, y llevaba las relaciones internacionales de la entidad, participando en la organización de partidos amistosos de la Selección Española, "actividades de las que en muchos casos existen indicios, que se habría beneficiado, e incluso en algunos habrían sido promovidas y ofrecidas precisamente en búsqueda de un resultado lucrativo para él".

Las pesquisas determinaron que obtuvo más de 500.000 euros de su relación con partidos amistosos que el seleccionado español disputó con Corea, Argentina, Colombia, Chile, México y Venezuela, entre otros.

El papel de la AFA

En relación a la AFA, el magistrado apunta a los amistosos que España y Argentina disputaron el 14 de noviembre de 2009 en el Estadio Vicente Calderón de Madrid (España venció 2-1), cuando Diego Maradona era el DT argentino, y el celebrado el 7 de septiembre de 2010 en el Estadio Monumental de Buenos Aires, cuando Argentina goleó a la entonces flamante campeona del mundo por 4-1.

Al mes siguiente del segundo encuentro, el 28 de octubre de 2010, Gorka Villar "suscribió un contrato de asesoramiento jurídico con el presidente de la AFA, Julio Grondona (que falleció en julio de 2014) por el que Sport Advisers cobró 120.000 euros en 2011 y 100.000 en 2012", indicó la juez.

"Este caso tiene la particularidad de que de todos los pagos de las federaciones deportivas que se han visto a la sociedad de Gorka Villar, los de la AFA han sido los de mayor cuantía", subrayó.

El instructor del caso destaca que se observa una "especie de relación triangular, de una parte entre RFEF y las federaciones homólogas de terceros países con cuyas selecciones nacionales de fútbol disputan partidos amistosos la selección española; y de otra entre estas federaciones y Gorka Villar, cuya sociedad acaba percibiendo cobros de las aludidas federaciones", se dijo.