Un nuevo giro en el caso Medina. La notebook que el empresario acribillado el domingo en Ayolas y Circunvalación utilizaba, viajó desde la Jefatura de policía –donde permanecía guardada como evidencia desde su asesinato– hacia un despacho del gobierno provincial sin que la jueza a cargo de la causa, Alejandra Rodenas, se enterase. Según trascendió, la división Pericias Informáticas no habría podido desbloquearla por ser una Mac por lo que se decidió ponerla en manos de un funcionario político para que la desbloqueara. No sería otro que el secretario de Tecnologías de la provincia, Javier Echaniz. Para el presidente de la comisión de Seguridad de la Legislatura, Héctor Acuña, el gobierno contaminó evidencia y anticipó que tomará cartas en el asunto.
En diálogo con el programa Radiópolis (Radio 2), Acuña sostuvo que al tiermpo que la magistrada descubrió la movida, cualquier tipo de prueba que haya contenido la computadora podría haber sido eliminada. Apenas se enteró de lo sucedido, Rodenas solicitó la devolución de la laptop.
“¿Qué garantías tenemos los santafesinos que esta maniobra no les permite (al gobierno) borrar cualquier tipo de vínculo (con Medina)?”, preguntó el diputado peronista y a renglón seguido advirtió: “Que no respondan con la impericia de la policía, ni con la renuncia del funcionario”. A su entender, no hay argumentos que expliquen por qué la notebook fue a parar a la oficina de Echaniz. Además, señaló que le resulta sospechoso que el funcionario haya actuado sin haber consultado antes a su superior, el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Rubén Galassi.
Medina era un conocido empresario de la ciudad, sindicado narcotraficante y relacionado al ataque contra la casa del gobernador Antonio Bonfatti. El domingo pasado, perdió la vida junto con su novia, Justina Pérez Catelli, cuando volvía desde La Fluvial al hotel Pullman del City Center donde se alojaban ambos.
Héctor Acuña (Radio 2)