La campaña: Terminó 7° en su grupo con 21 puntos en 14 partidos, producto de 6 victorias, 3 empates y 5 derrotas. Convirtió 13 goles y sufrió 15. Macagno, Méndez, Velázquez y Ramírez jugaron la totalidad de los partidos. El delantero uruguayo fue el goleador del equipo con 8 conquistas y no hubo ningún otro futbolista que anotara más de un gol.
La figura: El Colo Ramírez. El atacante llegó para hacer goles y cumplió con creces su cometido. Anotó 8 en 14 juegos, a razón de más de medio por partido. Su deuda (a tono con el equipo) fue hacer goles en los partidos más importantes.
La decepción: Lo de Franco Díaz que cuando llegó se acomodó entre los titulares y prometía, pero luego su nivel cayó y una declaración desafortunada lo marginó del equipo.
La revelación: En este rubro se puede anotar a Rodrigo Fernández Cedrés, quien llegó silbando bajito y no solo se ganó un lugar, sino que fue uno de los mejores del equipo en el torneo.
El mejor partido: Las victorias fuera de casa ante Lanús y Unión en las fechas 2 y 4 fueron las actuaciones más convincentes del equipo de Larriera.
El peor partido: La goleada 0-4 con Racing fue de lo más flojo por el resultado (aunque en el desarrollo no hubo tanta diferencia). El equipo tampoco pareció estar a la altura en los choques ante Boca y Defensa cuando se jugaba la clasificación y perdió claramente ambos juegos.
El gol: El 1° gol de Ramírez a Unión fue una obra de arte con varios toques de primera y una gran definición incluida. Fue el mejor momento de Newell's en el certamen.
Balance: La campaña desde lo numérico fue discreta, pero terminó siendo decepcionante (otra vez) pues fue de mayor a menor. Las 4 victorias en el arranque generaron una alta expectativa que se fue diluyendo con el correr de los partidos. La derrota en el clásico y la no clasificación a los playoffs terminaron siendo frustrantes para el hincha rojinegro.