Mientras los equipos de gobierno de la administración de Omar Perotti ya iniciaron las reuniones con los delegados del gobernador electo Maximiliano Pullaro en temas troncales de la administración provincial, como economía o seguridad, el actual ministro de la Producción, Daniel Costamagna, recorre los últimos tres meses de su tarea al frente de esa cartera.

Y lo hace sabiendo que ha transitado cuatro años duros, marcados a fuego por la gran tragedia de la sequía (que ha condicionado el desarrollo de industrias clave del campo, como la de la carne vacuna o la lechería), pero convencido de que pese a esa circunstancia, siempre ha estado a la par de la gente “que produce, que trabaja y que invierte en la provincia”: “Con aciertos y errores, pero nunca sacándole el cuerpo”, señaló en el programa Punto Medio de Radio 2.

“Cuando asumí la gestión, juré por los santafesino y acepté el desafío diario de mejorar la calidad de vida de la gente: con más conectividad, con caminos rurales, con el boleto educativo rural gratuito, buscando aumentar nuestras exportaciones. En ese sentido, 2022 fue un año récord aún con la peor sequía de la historia. Nunca le sacamos el cuerpo, con errores y aciertos, pero siempre escuchando y acompañando a quien produce, a quien trabaja y quien invierte en la provincia”, aseveró.

Desde su lugar al frente de Producción, “empujamos junto a los productores para poner a Santa Fe en el tope de la generación de empleo, de las exportaciones y las inversiones a nivel nacional. Hoy estamos exportando a 150 países y llegamos a lugares desde donde antes importábamos: le estamos llevando maquinaria agrícola a Australia, a los países bálticos o Sudáfrica".

"Ese fue el sesgo que le puso Perotti a su gestión: producción, educación y trabajo. Y hoy miles de pibes tractoristas, torneros, soldadores, plegadores, tamberos, han encontrado a través del oficio un rumbo en la vida, y ese es el mayor desafío que siempre tuvimos. Nosotros nos criamos con esos valores: nos preguntábamos a la noche cómo nos fue en la escuela y en el trabajo. Esos son valores que nunca deberíamos haber abandonado. Hoy el país sería distinto y mejor si las decisiones que se tomaran, fueran mirando al interior, a los que ponen el lomo desde muy temprano”, enfatizó.

Costamagna junto al gobernador Perotti.

El drama de la sequía en el norte

El prolongado lapso sin lluvias que asoló los campos de la región hizo estragos en el norte de la bota. En departamentos como General Obligado y Vera, ubicados en la ecorregión denominada Cuña Boscosa, la sequía se ensañó con el sector ganadero, que sufrió alta mortandad de vacas y terneros y dejó a los productores con más deudas que fuerzas.

“En el norte algo ha llovido y los campos van a mejorar poco a poco. Después irá mejorando la hacienda. Nosotros ahí hemos estado trabajando mucho, aunque está claro que la ayuda nunca alcanza. Se ha hecho un esfuerzo enorme, y si bien las lluvias han acomodado un poco las cosas, son procesos largos, por lo que creemos que se irá recuperando poco a poco”, manifestó Costamagna.

Hace algunas semanas, en esta misma columna, una productora de Fortín Olmos, Yolanda Arce, entregó una mirada contraria a la del ministro: dijo que nunca fueron escuchados por el gobierno provincial y que el alivio era doble, por las lluvias que empezaban a caer y por el cambio de gobierno. "Primero, soy muy respetuoso de las opiniones de la gente, no me van a encontrar confrontando”, arrancó el ministro. “Pero sí digo que el esfuerzo ha sido grande en el norte y no sólo en dinero: la provincia ha invertido más de 4 mil millones de pesos allí y se han hecho otras obras que van a perdurar en el tiempo y que le darán a la región un perfil más fuerte y productivo”.

“Hemos trabajado mucho con las asociaciones para el desarrollo y las comunas; en el caso concreto de Yolanda, nosotros le hemos bajado fondos a la comunidad de Fortín Olmos, hemos trabajado con créditos a tasa cero, aportes directos, elementos. Quizás, a veces la gente lamentablemente por cuestiones personales o políticas no se acercan a los lugares donde deben estar, pero hemos ayudado mucho a la comuna y a todo el departamento”, abundó.

Soy consciente de que la asistencia nunca alcanza, porque la sequía ha sido tan grave que realmente va a llevar mucho tiempo la recuperación: el estado de la hacienda ha quedado muy mal. Yo produzco en los bajos submeridionales, conozco la zona desde la actividad privada y lo que se ha hecho en esta gestión es para mirarlo en unos años. Se buscó junto al gobierno de Santiago del Estero darle a la región una estabilidad productiva, en la calidad de vida a la gente, en caminos, acueductos, en obras de largo plazo”.

El ministro destacó el avance en la exportación de maquinaria agrícola.

La industria lechera y un palito para la administración nacional

Quizás esperábamos más apoyo del gobierno nacional, pero desde lo que respecta a la provincia, estuvimos presentes en necesidades como el acarreo de agua o la provisión de alimentos para animales. Y también en el esfuerzo económico: se presentaron 15 mil certificados de emergencia y hoy esos productores santafesinos tienen la posibilidad de diferir totalmente sus obligaciones impositivas. Se han otorgado créditos de 5 mil millones de pesos con tasas súper subsidiadas, y se ha presentado un proyecto de ley para asistir de manera más rápida y contundente a los productores”, enumeró.

Sobre las medidas que anunció el ministro Massa para el sector lechero, de los más afectados por la coyuntura, Costamagna dejó en claro que para él llegaron un poco tarde: “Las veníamos pidiendo hace un año y medio. La situación internacional es compleja porque el mercado está en una fase de precios bajos y las exportaciones son a pérdida. Nueva Zelanda está abasteciendo a mercados a los que también llega Argentina, como por ejemplo China, y Brasil está en situación de auto abastecimiento. Por lo que lo peor que podría pasar es que ese volumen de leche que se va se volcara al mercado interno, con todos los daños que eso produciría a las más de cien pymes que tenemos en la provincia”.

“Nosotros tenemos una lechería en crecimiento, con un fuerte componente exportador, y estas medidas van a aliviar la situación porque las retenciones a la leche en polvo son del 9% y al queso del 4,5%. En la medida en que tengamos un buen acuerdo de precios que no perjudique al consumidor y beneficie también al productor, creo que de a poco se irá recomponiendo”, tiró. “Es un compromiso tomado por todas las entidades de la producción láctea de que se cuide al consumidor y sobre todo al productor, que es el primer eslabón en la cadena y el que posibilita la generación de miles de empleos y 10 mil millones de litros al año”.

Una transición “a teléfono abierto”

Finalmente, Costamagna se mostró predispuesto a empezar a trabajar con los funcionarios que estarán a cargo de la gestión en Producción desde el 10 de diciembre: “Nosotros estamos a disposición, todo el equipo de trabajo. No nos reunimos aún porque nadie nos convocó pero estamos para ayudar y fortalecer la transición por el bien de la gente y la producción santafesina”.

Y consultado sobre la idea de Pullaro de reunir en un único ministerio a producción, infraestructura y ambiente, opinó: "Yo creo que son elecciones que cada dirigente, en este caso el gobernador electo, tienen la total libertad de tomar para darle la impronta a su gestión que crean mejor. Pero esas tres cuestiones siempre fueron de la mano. Nosotros estamos dispuestos a acompañar y colaborar, tenemos los teléfonos abiertos para contribuir a una transición que sea lo mejor para los santafesinos”.